En el pasado, si alguien quería modificar su apariencia para lucir más joven y con mayor atractivo, recurría a la cirugía plástica. Si bien este tipo de intervención tiene lugar preponderante en el universo de la estética facial y corporal, no todas las mujeres se animan a dar este paso por miedo al bisturí, convalecencia prolongada o presupuesto limitado.
Sin embargo, lo anterior ha dejado de ser problema gracias a los avances en Estética, Cosmetología y Dermatología; así, tenemos al alcance diversos procedimientos sin bisturí. “Estos métodos permiten disminuir líneas de expresión de rostro y cuello, aportar volumen a los labios, atenuar manchas y venas varicosas superficiales, reducir la celulitis y modelar el contorno corporal”, refiere el Dr. Jorge René Oropeza Morales, ex presidente de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva, y jefe de Cirugía Plástica y Quemados del Hospital Dr. Rubén Leñero, en la Ciudad de México.
“Otra ventaja es la obtención de óptimos resultados sin necesidad de sufrir incapacidad larga y dolorosa. Además, los procedimientos pueden efectuarse en el consultorio y resultan más económicos, rápidos y menos incómodos”, explica el Dr. Ramón Rosado Castro, también expresidente de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estética y Recons-tructiva, y director médico de las clínicas Depilight.
¡Adiós arrugas! con rellenos inyectables
Si te miras al espejo y confirmas que el paso del tiempo ha empezado a dejar huellas en tu rostro (presenta marcas, surcos y “patas de gallo”), puedes corregirlas con la aplicación de:
Toxina botulínica tipo A. Mejora el aspecto de las arrugas de entrecejo, frente y contorno de los ojos. Al inyectarse en dichas zonas, bloquea los impulsos de las terminaciones nerviosas que contactan con la musculatura facial.
Esta acción relaja los músculos de tal manera que no pueden contraerse y, como resultado, la piel permanece lisa durante 4 a 6 meses. Respecto a la seguridad de dicha sustancia.
El Dr. Rosado Castro comenta que “tras utilizarse en millones de personas de todo el mundo, hasta la fecha no hay registro de daños”. A su vez, el Dr. Oropeza Morales indica que “sólo pueden aplicarla especialistas médicos entrenados y en el consultorio, pues hay gente sin escrúpulos que la inyecta en gimnasios y estéticas, y lo más grave es que usan productos ‘piratas’”.
Acido hialurónico. Es un compuesto que produce nuestro organismo en pequeña cantidad, cuyas funciones son conservar el nivel adecuado de hidratación y mantener la piel con aspecto joven.
Conforme envejecemos disminuye y comienzan a aparecer líneas de expresión. Este deterioro ya dejó de ser problema, pues es posible producir ácido hialurónico en laboratorio para aplicarlo mediante inyecciones para rellenar las arrugas. Se utiliza, principalmente, en los surcos que nacen de la nariz a la boca, líneas del entrecejo, arrugas finas alrededor de la boca o mejillas y en los labios para aumentar su volumen.
“Al igual que la toxina botulínica, ha demostrado ser un método seguro y efectivo, por lo que se puede repetir el tratamiento cada 6 ó 12 meses”, asegura el Dr. Rosado Castro.
Sostenes invisibles. Otro procedimiento que también mejora la apariencia del rostro son los hilos rusos, ya que desvanecen los efectos del envejecimiento facial al estirar la piel del rostro. “Son hilos de polipropileno, material que no es rechazado por el organismo, resiste grandes tensiones y es imperceptible, incluso al tacto. Se introducen en algunas zonas de la cara —con ayuda de una aguja— para estirar la piel y lograr que desaparezcan las líneas de expresión, levantando las áreas que tienden a perder firmeza”, explica el Dr. Oropeza Morales.
