¿Obesidad o sobrepeso?

Es bien sabido que para la realización de todas las funciones fisiológicas del organismo (digestión, crecimiento o mantenimiento de la temperatura corporal), o bien, el desarrollo de cualquier actividad física e intelectual, se requiere energía, la cual es proporcionada a través de la alimentación. Así, cuando ésta se torna excesiva en calorías (el concepto se explicará más adelante), el cuerpo la almacena en forma de grasa, dando pie al excedente de peso corporal, es decir, a sobrepeso u obesidad.
Ahora bien, puede decirse que una persona presenta sobrepeso cuando se encuentra 10% por encima del ideal para su edad, estatura y complexión, pero de llegar a 20% (o superarlo) se hablará de obesidad. Vea este ejemplo: si usted es hombre mayor a 18 años, mide 1.70 metros y su complexión es delgada, su peso ideal se encuentra entre 57.9 y 62 kilos, pero si la báscula dice que en realidad pesa 83 kilos, tendrá un exceso de 21 kilos, lo que equivale a casi 30% arriba del ideal, en otras palabras, se trata de una persona obesa. Usted puede verificar su peso ideal en el apartado Esquemas (al costado izquierdo de su pantalla), de acuerdo a sus características físicas, o bien consultando el apartado Herramientas al lado derecho de este artículo.
Otra forma de encontrar la diferencia entre obesidad y sobrepeso es calculando el índice de masa corporal (IMC), para lo cual se toma en cuenta la cantidad de kilogramos del sujeto, cifra que se divide entre el resultado de su estatura elevada al cuadrado. Por ejemplo, un hombre cuya estatura es 1.70 m y pesa 85 kilos, tiene un IMC de 29.4, es decir, 85 kilos entre 1.70 x 1.70 (2.89) = 29.4. Siguiendo esta fórmula calcule usted su IMC y compárelo con la siguiente tabla que se ajusta a la anatomía del ciudadano promedio mexicano (según la Fundación Mexicana para la Salud): Es importante hacer hincapié en que el peso normal para cada individuo guarda relación directa con edad, sexo, talla, actividad física y desarrollo esquelético, derivándose de esto último las llamadas complexiones delgada, mediana y gruesa (usted puede calcular su IMC en Herramientas o Esquemas, como lo hizo en la explicación anterior).
¿Qué es una caloría?
Antes de continuar es importante mencionar que una caloría es la capacidad de un nutriente para producir calor, es decir, una unidad de energía, la cual es generada cuando lo que comemos es metabolizado (es óptimamente aprovechado por las células de todo el cuerpo). Este ejemplo puede ser ilustrativo: decimos que una manzana tiene 35 calorías, porque al ser metabolizada por nuestro cuerpo produjo 35 unidades de calor/energía (por lo general se expresa en términos kilo-caloría).
Es así que cada nutriente genera diferentes calorías; por ejemplo, proteínas y carbohidratos producen 4 Kcal por cada gramo ingerido, mientras que las grasas provocan 9 Kcal por gramo. Es importante reiterar que las calorías ingresan al organismo y son transformadas en energía, pero las que no participan en este proceso no son eliminadas, sino almacenadas en el organismo en forma de grasas (el recurso para deshacerse de las calorías es quemándolas, a través del ejercicio). Cada 7000 calorías acumuladas se traducen en 1 kilo de grasa en nuestro cuerpo, distribuyéndose, de acuerdo al sexo, de la siguiente manera:
Hombre. En dorso del cuello, hombros, espalda, cara, mitad superior del tronco, región abdominal y, al envejecer, en todo el vientre.
Mujer. En vientre, caderas, muslos, región mamaria y, al envejecer, en barbilla, nuca y nalgas.
Niños. Se sitúa en pubis, caderas, brazos, mejillas, dorso de manos y pies.
Cifras y consecuencias
El estudio científico al que nos referimos al inicio del artículo, indica que un hombre con 30 kilos de más es 12 veces más propenso a morir en comparación con quien tiene apenas 8 o 10 kilos extras, pues su exceso de grasa corporal altera el eficiente funcionamiento de importantes órganos, en otras palabras, su salud está en riesgo. El incremento de peso guarda estrecha relación con padecimientos como:

Ácido úrico. Compuesto que desecha diariamente nuestro organismo como parte del proceso de renovación diaria de las células que lo conforman. De manera natural se elimina por la orina, pero cuando esto no sucede se acumula en la sangre y se deposita poco a poco en las articulaciones, en forma de cristales, provocando inflamación y dolor muy intenso. Entre las causas por las que el ácido úrico no es eliminado correctamente se pueden mencionar obesidad y diabetes, enfermedades que provocan mal funcionamiento de los riñones, lo que genera la acumulación del compuesto, que aunado a residuos de sales y cristales de calcio forman pequeñas piedras, conocidas como cálculos.
Cáncer. De manera muy sencilla, este padecimiento puede explicarse como una falla en el mecanismo que regula el desarrollo de las células que se encuentran a lo largo de nuestro cuerpo, hecho que de presentarse provoca que algunas de éstas crezcan sin control y se altere su estructura genética. Uno de los factores que pueden acelerar el proceso es la acumulación de grasa en el cuerpo, así como compuestos contaminantes, virus y luz solar.