Inició el largo adiós a Leonardo Da Vinci en el Palacio de Bellas Artes. Es la cuenta regresiva para embalar las piezas como el Códice sobre el vuelo de las aves o el Estudio para cara de ángel de “La virgen de las rocas” que conforman la exposición Leonardo Da Vinci y la idea de la belleza y las cuales volverán a su lugar en la Biblioteca Real de Turín.
Y en este largo adiós comenzó desde la media noche del jueves, cuando las personas comenzaron a llegar para ser los primeros en formar parte del maratón que el Instituto Nacional de Bellas Artes anunció el pasado martes 18 de agosto. Son 72 horas continuas de visitas a la exposición de Da Vinci y de Miguel Ángel Buonarroti.
Las chamarras, los paraguas, ojos de desvelo, vasos de café de mini súper, pero sobre todo mucho entusiasmo por entrar a ver las muestras permeaban en el ambiente previo a ingresar al Palacio de Bellas Artes. Esas exposiciones, especialmente la de Da Vinci que cierra mañana, que tanto se ha escuchado, visto o leído en los medios.
Y mientras esperan algunos platican, aunque otros escuchan al organillero madrugador que llega con su agudo sonido a ambientar la espera.
Juan José Cruz ha sido testigo algunas mañanas de “los inmensos colonones” que se hacen en la explanada del Palacio de Bellas Artes para entrar a ver las exposiciones. Dice que cuando le ha tocado ir con su cilindro musical le gusta pensar que hace más ligera la espera de los asistentes a las muestras de Da Vinci y Miguel Ángel.
Y al mediodía de ayer, cuando algunos los asistentes recogieron sus boletos y les asignaron sus stickers con el horario correspondiente a su visita, el señor Cruz continuaba girando la manivela y agradeciendo a quienes depositaban una moneda en su sombrero.
“La verdad es que hay mucha gente, al menos cuando yo vengo hay mucha, y toda está desde muy tempranito porque quieren entrar al Palacio (…) A mí sí me gustaría entrar, pero a ver un concierto o ver una obra de teatro, más bien”, expresó en entrevista el hombre de 62 años.
HACER FILA PARA DISFRUTAR MÁS. Graciela e Iván son novios; ella es de Guatemala y voló exclusivamente al Distrito Federal, donde vive él, para no dejar de ver la muestra. El abogado de 31 años de edad pernoctó en las afueras del Palacio con el afán de formar parte del primer grupo que a las 8:00 horas de este viernes inauguró el maratón.
Graciela Torrano se dijo emocionada por “ver la belleza que tenía Da Vinci, porque como el nombre indica, es su idea de la belleza (…) apenas llegué de Guatemala ayer porque estoy trabajando en un proyecto, pero hice una pausa para volar acá y ver la exposición, en la noche regreso a Guatemala”, comentó a Crónica la publicista.
“Es por demás decir la emoción que se siente como mexicano tener en este lugar, que para mí es tan hermoso, una exposición de esta talla, porque es una oportunidad única y que no podemos perdernos (…) pensé que estaría el maratón, porque con Yayoi Kusama también se hizo, y para disfrutar más la exposición quise hacer la fila que sabía iba a ser enorme”, explicó Iván.
MÁS QUE SÓLO LA IDEA. En el vestíbulo del Palacio algunas personas comenzaron a salir de las exposiciones, como Araceli, quien estudia Química en la UNAM y fue con sus primos. Para ella la muestra fue una “grata experiencia”, porque le permitió reflexionar sobre la perfección y el arte.
“Aunque no son obras en sí, ver esos bocetos a mí me conmovió porque pone a pensar, al menos a mí, cobre cómo se busca el perfeccionismo, y cómo a través del arte se pueden hacer cosa preciosas, porque para hacer un dibujo se requiere más que sólo la idea, se necesita hacer pruebas y todo eso, que realmente es muy padre”, dijo la joven.
Ignacio, su primo, quien estudia el bachillerato coincidió con que las grandes obras requieren de un proceso: “Esta bien que nos pongan a pensar en que hay que hacer como ensayos antes de tener la obra, porque muchas veces siempre conocemos los dibujos o los cuadros ya hechos”.
ACTIVIDADES PARALELAS. Como parte del cierre de esta muestra el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) anunció para este fin de semana actividades artísticas durante el maratón de 72 horas continuas de la exposición que se va, entre las que destacan proyecciones cinematográficas y teatro.
En el Corredor Ángela Peralta, el público podrá ver las películas La agonía y el éxtasis, de Carol Reed, asimismo, el Ballet Folklórico de México presentará un espectáculo, mientras que el teatro infantil estará presente con Onomatopeyas, de Astillero Teatro.
Asimismo, el INBA presentó el pasado miércoles 19 de agosto el catálogo de la exposición Leonardo Da Vinci y la idea de la belleza, donde se plasman ensayos de especialistas como John Spike, para hablar de la idea que pudo haber tenido Leonardo Da Vinci sobre la belleza.
Este proyecto busca perpetuar la reflexión en México, en torno a la magna exposición, donde se pueda detener el lector en aspectos y profundizar en ellos, como no es posible hacerlo a partir de un guion curatorial en la sala de un museo.
VISITAS. El recinto de mármol abrió desde las 8:00 horas de ayer viernes de manera continua hasta las 8:00 horas del lunes 24 de agosto. Las visitas son de 220 personas cada media hora.