Esmaltes de uñas, estética y salud

Reza un dicho popular que «en los zapatos se conoce a la persona», ¿y qué me dice usted de las manos?. Mucha gente trata de descubrir la personalidad de quien tienen enfrente a partir de sus manos, de las cuales parte esencial son las uñas. Si lucen limpias y recortadas, o largas y bien pintadas, podremos pensar que tratamos con alguien que cuida su aspecto, su pulcritud y que bien puede ser digna de nuestra confianza, y… mejor no hablemos del lado opuesto.
¿Qué función tienen?
Las uñas son estructuras formadas por una proteína llamada queratina, y crecen continuamente a partir de su propia matriz localizada en una porción del dedo, el lecho ungueal. En su interior no existen terminaciones sanguíneas ni nerviosas, pero alrededor de ellas sí las hay, lo cual las hacen muy sensibles a estímulos como temperatura, presión o dolor. Son de estructuras planas y convexas, y brindan importante protección a la delicada punta de las manos.
Contrario a lo que se cree, posen muy poco calcio y su dureza se debe a su estructura formada por varias capas de células sin núcleo rellenas de la ya mencionada queratina, además de otros elementos, como fósforo, hierro, agua y grasa.
Mire usted si no son importantes las uñas; a decir de los especialistas, si recibiéramos un golpe en la parte de los dedos que protegen, el dolor sería verdaderamente insoportable. Por ello debemos extremar precauciones y protegerlas de factores externos que pueden afectarlas, sobre todo a la región conocida como lúnula (visible en la base y fácil de distinguir por su color rosa más blanquecino y su forma de media luna) donde se lleva a cabo el proceso de regeneración.
Ahora bien, las formula-ciones de los innovadores esmaltes para uñas permiten cuidado a la vez que dan mejor apariencia. Por ejemplo, ahora tienen mayor velocidad de secado, lo que muchas usuarias agradecen.
Por otra parte, estos productos están enriquecidos con minerales, como calcio y magnesio, que dan fortaleza y protección ante posibles golpes o astilladuras, además de que impiden que se debiliten. Otros compuestos permiten a la uña respirar por sus diminutos poros, lo cual resulta de vital importancia, ya que de esta manera se evitan posibles ataques de hongos que pudieran infec-tarlas.
Las vitaminas también participan, pues con ellas se garantiza crecimiento sano y constante, además de que dan color y reparan lesiones, y evitan posibles enfermedades, las cuales se manifiestan con cuarteaduras.