¿Gobierno eficaz o eficiente?…

En esta semana hemos escuchado todo tipo de comentarios con relación a lo que sucedió con un problema de egos que desencadenó la furia e indignación de la población nacional en general, pero sobre todo de los aficionados al futbol, a favor o en contra de los protagonistas; Miguel “El Piojo” Herrera, director técnico de la selección nacional versus Christian Martinoli, cronista deportivo de TV Azteca; o como dijera Francisco Zea, periodista y conductor de noticias de Cadena tres; un pleito entre un hombre patético del deporte contra un hombre patético comentarista; desencadenado por un debate en un aeropuerto en los Estados Unidos.
Pero Usted dirá ¿y eso que tiene que ver con temas serios? Pues nada más y nada menos que es una radiografía de lo que está sucediendo en nuestro sistema político y gubernamental a nivel nacional también; “El Piojo” y Martinoli ya se traían entre ceja y oreja desde hacía días, cuando el comentarista criticó la forma de actuar del entrenador nacional.
Pero lo grave no está en que se dijeron este par de personajes de la “farándula”, porque vaya que han sido unos verdaderos actores, desarrollando uno de sus papeles más populares en el medio deportivo; el Piojo un verdadero soberbio que no permitía que se le dijera nada y Matinoli, un comentarista que con el estilo crítico que lo caracteriza enardeció al dirigente.
Lo grave es darnos cuenta cómo reaccionan los “de arriba” con este tipo de shows; si en la política vemos o sabemos de algún funcionario o candidato que haga alarde de su cargo o “fanfarronea” con su charola, algún periodista sacará la de ocho columnas al día siguiente pero nada más, entonces ¿qué pasa?¿Por qué en este caso las autoridades, deportivas claro está, reaccionaron rápidamente ante una acusación y presión de la población y corren al director técnico?, sin embargo en el ámbito político han sacado infinidad de problemas con igual número de pruebas y no sucede absolutamente nada!
¿Cuántos numeritos hemos visto? y conforme pasa el tiempo, estos se incrementan, ya nada les da pena, ya nada les incomoda; lo mismo podemos enterarnos que los evidencian haciendo negocios turbios y recibiendo pagos por “favores”, que en cualquier antro bailando en total estado de ebriedad.
Lo peor ha estado pasando con los últimos acontecimientos, se escapa el “Chapo” y no pasa nada, ni se sanciona a nadie, bueno, a nadie de primer nivel porque ya “encontraron” gente involucrada y a esos sí los procesaron, pero no pasó nada con el Secretario de Gobernación; sucedió lo de los estudiantes de Ayotzinapa y el desgastado fue Murillo y el Presidente Peña le dice a los padres de los muchachos que superen este acontecimiento, como si fuera cualquier cosa perder un hijo pero no pasa nada, ningún pez gordo se va; hace años pasó la desgracia de la guardería ABC y nada aún de manera definitiva, mejor falleció Juan Molinar Horcasitas, director entonces del IMSS federal y quien diera la concesión a la guardería de Sonora, tal vez alcanzado por la justicia divina porque la del gobierno nunca.
En fin, así podemos enumerar infinidad de casos y “no pasa nada” y ahora un señor neurótico le grita y golpea a otro y ahí sí es destituido; ¿qué le falta entonces a nuestras autoridades para ejercer la justicia? Y lo digo no porque quiera que al “Piojo” lo hubieran dejado al frente del equipo,¡no! Se cometió una falta y hay que asumir las consecuencias, el señor es una figura pública y debe comportarse a la altura de su cargo;¿qué está esperando el gobierno, la presidencia, o a quien le corresponda hacer justicia y hacer valer su juramento?
Dicen que el poder cambia a las personas, pero la verdad es que elpoder las muestra tal cual son, saca su verdadera esencia y se descaran; se vuelven abusivos y arrogantes, soberbios y lo que menos les interesa es la gente.
Ni siquiera tenemos que irnos tan lejos, en nuestro propio San Luis, aún no se llega el momento de tomar protesta y ya están abusando de su fuero y haciendo transas, preparando el camino para cuando estén en total desempeño de sus funciones. No sin antes haberse aprovechado del trabajo de la gente para hacer sus campañas; y lo digo por experiencia personal, a una servidora le sucedió con la diputada plurinominal Lucila Nava Piña, escapada del PRI y refugiada en Movimiento Ciudadano, ahora ni las llamadas y mensajes responde por no querer asumir su responsabilidad en un acuerdo de pago a varias personas que le otorgamos asesoría a ella y cuatro candidatos más de su partido a diputaciones locales y federales; Trinidad Guardiola, Cinthya Guerrero, Delia Macías y Guty Castillo; ojo Eugenio Govea, hay que fijarse bien a quién invitas y le das directo todos los privilegios para representar al joven equipo político que tienes en San Luis. Y como dije en la columna pasada, aún hay mucha tela de donde cortar e iremos armando el ajuar.
¿Cuál cambio? Tal parece que con el pasar del tiempo este tipo de gente se escoge para formar parte de nuestro ya tan deteriorado equipo de servidores, que lo único que quieren es servirse a ellos mismo a costa de la gente.
Queremos gobiernos eficientes, que sepan aprovechar los recursos humanos y financieros para hacer crecer nuestro estado y en general todo el país y den resultados de calidad para así llegar a ser eficaces logrando sus metas y objetivos;que hagan gestión y no nada más que estiren la mano y se quejen porque no tienen dinero y todo se lo repartan entre unos cuantos; los recursos son para la gente, para cumplir con la responsabilidad de dar al menos lo básico en algunos lugares y hacer crecer a otros, para hacer vivir a los ciudadanos con dignidad, porque nadie los puso a fuerza, cada uno decidió así hacerlo.
Y cuidado lleguen señores y señoras diputadas a sus curules y se nieguen a recibir a quienes los hicieron llegar, a los ciudadanos de a pie, a la gente que creyó en que con ustedes nuestro nivel de vida será mejor. Espero no les de amnesia como a muchos y no recuerden a la gente que les pidió trabajo, medicina y material para sus casas y a quienes ustedes hicieran tantas promesas con tal de obtener su voto. Ojalá se dejen de descalificar y se unan para trabajar por un bien común que somos todas y todos los habitantes de San Luis Potosí.
Y no pidan fiado si tienen toda la intención de no pagar como la diputada Lucila, quien desde antes de llegar al congreso ya mostró el cobre y lo que será su gestión, además de otros amarres que ya hizo por ahí con algunos presidentes municipales, así que la estaremos monitoreando estos tres largos años.
Nos leemos en la próxima amigas y amigos…¡hasta entonces!.

Cecilia Gallegos Cepeda
Consultoría en Imágen y Comunicación
@cecygallegos_