La piel de gallina sí tiene remedio

Puede presentarse a cualquier edad, pero aparece con mayor frecuencia en la adolescencia. Se trata de la queratosis, padecimiento que se relaciona con la acumulación de la proteína queratina en la superficie de la piel, condición que no afecta a la salud pero que brinda aspecto desagradable.
¿Por qué se nos pone la «piel de gallina»?
La queratosis puede presentarse a cualquier edad, pero aparece con mayor frecuencia en la adolescencia. Se relaciona con la acumulación de queratina (proteína que es parte fundamental de la epidermis, pelo y uñas) en la superficie de la piel.
Se caracteriza por pequeñas protuberancias en la piel (generalmente en hombros, muslos, espalda y glúteos) con tonalidades desde el blanco hasta el rojo.
Esta apariencia puede convertirse en motivo de cuchicheos, lo que ocasiona que quienes las padecen las oculten en situaciones como una cena de gala o al acudir a la playa.
A menudo se le confunde con espinillas, sin embargo, éstas acumulan sebo, mientras que la queratosis pilaris (como se le conoce médicamente) ocurre porque la acumulación de queratina en los folículos de los vellos da lugar a pequeñas protuberancias.
Suele empeorar durante el invierno y tiende a desaparecer en el verano, ya que el frío ocasiona que disminuyan el agua y grasa que mantienen lubricada a la epidermis, dando lugar a la piel reseca.
No es un trastorno dañino, pero puede ser desagradable a la vista y tacto, por lo que quienes la sufren desean eliminar la piel de gallina por motivos estéticos.
La queratosis se debe a una condición genética, que es común en personas con piel reseca y dermatitis atópica (erupciones que provocan picor). Se sospecha que puede agravarse con algunos alimentos (leche y sus derivados, por ejemplo), aunque no hay datos concluyentes al respecto.
En ocasiones, estas molestas erupciones desaparecen espontáneamente al concluir la adolescencia. Sin embargo, cada caso es diferente, por lo que los pacientes requieren atención personalizada de un médico y tratamientos para la piel de gallina a fin de evitar que reaparezca.
¡Deshazte de la queratosis!
La solución para la «piel de gallina» se basa en eliminar la acumulación de células muertas en la piel. Para ello es común la utilización de exfoliantes, componentes que tienen la capacidad de eliminar células muertas, puntos negros, impurezas y grasa, agentes que tienden a obstruir los poros e impedir que la piel se regenere. Sigue estos consejos de los expertos al utilizarlos:
Ya sea en forma de gel o crema, los exfoliantes para el cuerpo deberán aplicarse en la ducha, durante 30 segundos, mediante suave masaje en las zonas donde se encuentren las protuberancias.
Es recomendable elegir productos que contengan alfahidroxiácidos (AHA), mejor conocidos como ácidos frutales, los cuales han demostrado ser muy efectivos para tratar la queratosis, aunque también son utilizados para combatir arrugas y conservar apariencia saludable y juvenil en rostro, cuello y manos.
Después del baño se recomienda usar cremas humectantes con ácido glicólico para suavizar y evitar la piel reseca. Ten en cuenta que los resultados se observarán, en promedio, a los 2 ó 3 meses.
Por otro lado, hay quien recurre a la aplicación de vaselina con agua o ácido salicílico (que desprende la capa superficial de la piel) para aplanar los granos, así como a cremas que contienen tretinoína, químico relacionado con la vitamina A, procedimientos que dan buenos resultados.
El dermatólogo tiene la última palabra
Aplicar en casa tratamientos para la piel de gallina puede dar resultados, pero siempre es recomendable buscar la opinión calificada de un dermatólogo, que en casos severos podrá prescribir cremas humectantes con contenidos más altos de AHA o vitamina A y D, jabones suaves que no irriten la piel, así como baños en tina semanales con aceites naturales.
También es necesario visitar a un dermatólogo antes de someterse a tratamientos intensivos, que pueden incluir un peeling, procedimiento químico o mecánico mediante el cual se remueven los granitos de la queratosis.
Este proceso utiliza principalmente ácido glicólico, aunque también suele sustituirse por el pumpkin-peel, compuesto derivado de la calabaza que actúa igual que otros ácidos y que además es rico en vitamina A.
También existe la técnica micro-peel para tratar problemas de poros dilatados y marcas de acné. Se basa en la remoción de la capa superficial de la piel con un aparato que posee cristales que giran a gran velocidad al tiempo que succionan los residuos; la sesión dura, en promedio, 30 minutos.
Finalmente se encuentra la dermoabrasión, método similar al anterior, con la diferencia de que los cristales son sustituidos por diamantes, lo que da resultados notables, pero eleva el costo.
Si sufres «piel de gallina» considera que la dermatología y la industria cosmética ofrecen soluciones con resultados palpables, lo cual impedirá que tengas que ocultar alguna parte de tu cuerpo por miedo al «qué dirán».