Las relaciones sexuales

Una relación sexual es un encuentro íntimo, físico y emocional entre dos personas. En ese encuentro, las personas unen sus cuerpos de una manera especial y expresan sus sentimientos y emociones.

Las relaciones sexuales constituyen un aspecto muy importante de la vida y de la sexualidad de las personas.

El comienzo de las relaciones sexuales debe ser una decisión completamente personal y libre. Contar con información adecuada no sólo es un derecho básico de todas las personas, sino que también es una manera de no correr riesgos innecesarios para la salud.

Cuando la iniciación sexual se da en un marco de afecto, cuidado y atracción, es más probable que sea más placentera y con mayor sensación de seguridad. Un inicio sexual precipitado, cuando existen dudas o no se tiene la preparación adecuada, puede ser contraproducente. Es un derecho de cada persona decidir cuándo quiere iniciar sus relaciones sexuales.

Es importante no hacer caso a presiones que a veces pueden venir de la pareja o de los amigos y amigas. Durante la relación sexual puede producirse una sensación muy placentera que se denomina “orgasmo”. El orgasmo se produce de manera diferente en varones y en mujeres.

Los primeros expulsan semen por su pene, es decir “eyaculan”. A las mujeres se les contraen involunt ariamente una serie de músculos que se encuentran cerca de la vagina, y segregan fluidos vaginales.

Como todas las personas somos diferentes, es bueno y positivo que le comuniquemos a nuestra pareja sexual lo que nos gusta y lo que no cuando mantenemos relaciones. A lo largo de relación sexual, el hombre eyacula semen en la vagina, incluso antes de llegar al orgasmo; por lo que la mujer puede quedar embarazada en cualquier momento de la relación, aún cuando el varón “acabe” afuera.

Por lo tanto, si una pareja no desea tener hijos es necesario usar algún método anticonceptivo. Además es importante prevenir el VIH/sida y otras infecciones de transmisión sexual y para esto es importante el uso del preservativo más allá de que se utilice otro método anticonceptivo adicional.

En hospitales y centros de salud hay servicios de asesoría en salud sexual y reproductiva donde podés informarte y acceder gratis a los métodos anticonc eptivos.

Si en la familia o en tu círculo más cercano resulta complicado hablar de determinados temas (por razones religiosas, generacionales, culturales o simplemente por pudor), es bueno poder hablarlos abiertamente con un médico. Como adolescente tenés derecho a asistir sola/o, con un amigo o con tus padres.Los y las adolescentes tienen derecho a la atención confidencial. Esto quiere decir que todo lo que hablen con el médico está protegido por el secreto profesional y nadie más puede saberlo. Siempre te tienen que atender, aunque no vayas con tus padres. Podés ir solo o sola, o con quien vos elijas.