La verdad sobre las fajas de ejercicio

Cuando empecé a ir al gimnasio usaba una faja que me hacía sudar muchísimo. Según yo, me hacía bajar la cintura porque después me medía y tenía un par de centímetros menos, pero luego, como por arte de magia, los volvía a subir.
No entendía lo que pasaba, hasta que le pregunté a un entrenador del gimnasio y me dijo que esos centímetros de menos son el resultado de la pérdida de agua, y que tan pronto como se recuperan esos fluidos regresan las medidas. ¡Qué horror!, así nunca iba a lograr una cintura chica. Después de eso, nunca más volví a usar una faja. Pero se me hizo buena idea contarte esto, porque como sabes ya regresé nuevamente a mi rutina de ejercicios, y en el gimnasio veo que hay mucha gente que las usa y me dan ganas de decirle que realmente no van a lograr bajar esos centímetros de más.Y no sólo eso, sino que me acuerdo que mi entrenador me dijo que limita la efectividad de los ejercicios, porque reduce tu energía y la intensidad de tu entrenamiento. Así que ya lo sabes, la próxima vez que vayas al gimnasio deja tu faja en casa y mejor dedícate a hacer correctamente tu rutina de ejercicios.