La ceguera de Margarita Zavala

Ahora resulta que Margarita Zavala, militante panista y esposa del ex presidente Felipe Calderón, acusa del fracaso panista en las pasadas elecciones intermedias a la dirigencia de su partido, en la persona de Gustavo Madero. Pero a Margarita no le asiste toda la razón en su empeño de criticar como deficiente la actuación de Madero. No toda la culpa es del aún presidente del Partido Acción Nacional (PAN); la mayor responsabilidad ha de recaer para ser ciertos, en su propio cónyuge.
No es para nadie un secreto que Zavala ha estado apuntando sus baterías desde hace unos meses en la sucesión de la dirigencia panista, y eso explica por mucho, el encono contra Madero y el endoso a él, de la derrota panista.
Habrá que decir empero, que en conjunto los doce años de gobiernos panistas a nivel federal –Vicente Fox-Felipe Calderón–, abonaron para que quienes salieron a votar el pasado domingo 7 de Junio, en un gran porcentaje no se decidieron por el PAN.
El panista Fox, sucesor del priista Ernesto Zedillo, se dedicó a todo, menos a gobernar. La empresa más vehemente del ex presidente Vicente Fox, fue la de convalidar la idea de que su esposa Marta Sahagún lo sucediera en la Presidencia.
Con Felipe Calderón, el país se convulsionó entre la inseguridad, la violencia y la muerte y con esa herencia en activo llegó a Los Pinos el priista Enrique Peña Nieto; quien tuvo que convalidar incluso, que para este domingo electoral se activara desde gobernación la clave “Junio negro” por la fragilidad de la seguridad nacional.
La señora Zavala sesga la crítica del porqué perdieron los panistas en posiciones electorales como no lo hacían hace 25 años, pues olvida que los administraciones federales de Acción Nacional, fueron tan costosas como los casi setenta años de gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Lo que sí es cierto, comprobable con hechos y cifras, es que con el gobierno de Calderón, el país se sumió en la inseguridad y el horror de las mafias delincuenciales, mismas a las que según el panista, se dedicó a combatir durante seis años con un gran porcentaje del presupuesto nacional.
El temor de un gran número la ciudadanos a los panistas, no se tiene hacia su dirigencia, sino cuando se encuentran en puestos de gobierno. La debacle del partido político de Zavala, empieza por sus pésimos gobiernos.
Acta Divina… Luego de los resultados del conteo del reciente proceso electoral, Margarita Zavala, reitera su deseo de competir por la dirigencia de su partido: «No quiero insistir en la confrontación interna, cuyo objetivo parece ser el control de las estructuras y del padrón de los miembros activos. No es la agenda de la exclusión de quienes no pensamos igual lo que nos demanda el PAN. Lo extraordinario de esta realidad es que nos exige a todos la disposición de tomar también decisiones extraordinarias. Yo estoy lista para participar. ¡Empezamos!».
Para advertir… El hilo de la madeja del mal panista, es su mal gobierno.