Muere Mario de la Piedra, pionero de la televisión mexicana

Mario de la Piedra, uno de los pioneros de la televisión mexicana, así como conductor y productor, falleció la madrugada de este martes a los 85 años, por causas naturales.
El reconocido productor dejó de existir en su casa de la Ciudad de México y sus restos fueron velados en una conocida funeraria ubicada en el sur de esta capital, informó Mari Marti, colaboradora de De la Piedra.
«Don Mario murió alrededor de la una y media de la mañana y su cuerpo lo trasladarán a la Agencia Gayosso», dijo Martí.
«Él era nuestro presidente vitalicio de la Asociación Mexicana de los Medios de la Comunicación A.C. (AMMCAC), que presidía Pedro Ferriz Santa Cruz, y fue hace unos ocho días cuando se nos puso un poco malito», mencionó la fuente.
Marti subrayó que hace 15 días estuvieron en un convivio y se le vio muy feliz departiendo con amigos, con quienes recordó diversos pasajes de su trabajo: La verdad es difícil aceptar lo ocurrido», añadió.
Familiares y amigos dieron el último adiós al productor
Familiares y amigos dieron el último adiós al productor y conductor Mario de la Piedra, cuyos restos fueron cremados hoy en una conocida funeraria del Distrito Federal.
En entrevista, su viuda Carmelita de la Piedra afirmó: «Él ya se fue, el gran hombre que fue siempre, el excelente esposo que me hizo feliz durante 62 años, con unos hijos maravillosos, decidió irse y hoy es el último adiós» .
Comentó que desde hace un mes su esposo decidió ya no luchar por seguir vivo, «se abandonó, ya no quiso comer, ya no quiso moverse y me dijo: ?Ya no quiero, ya estoy cansado’» .
Añadió que fue poca gente la que no lo conoció, «fueron pocos porque él era muy sociable. Le doy gracias a Dios que se fue tranquilo, se quedó dormido y ya no despertó. Se fue un pilar de la televisión, porque fue de los iniciadores en 1950, cuando en la Torre Latinoamericana se hizo el primer programa con el que inició la era de la televisión» .
Doña Carmelita afirmó que la comunicación y la producción fueron las pasiones de Mario de la Piedra en su vida.
«No sabía hacer otra cosa más que su trabajo, ayudó a muchas personas y descubrió a grandes talentos, siempre buscó apoyar a los artistas y en los últimos años a los locutores, que para él eran otra familia más» .
Añadió que siempre lo recordará como un ser «alegre, dicharachero, trovador, respetuoso, un gran padre, un buen amigo, siempre juntos en las buenas y en las malas» .