La Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú Tum, manifestó su interés por haber participado en las investigaciones de lo ocurrido en Iguala, Guerrero, en septiembre de 2014, cuando desaparecieron 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
La guatemalteca externó su interés de haber querido lanzar un estudio psicosocial de lo que ocurre en Guerrero y determinar las causas reales de por qué ocurrió la desaparición de los estudiantes.
«No me cabe duda que estuvo involucrado el crimen organizado, las mafias», indicó.
En conferencia de prensa que ofreció en las instalaciones del Instituto Nacional Electoral (INE), Rigoberta Menchú, comentó que a partir de su experiencia personal en Guatemala, es necesario que en casos como el de Ayotzinapa sea la honestidad la que prevalezca.
Exhortó a los padres de familia de los 43 estudiantes desaparecidos, a que traten de explicar la razón de cada uno de sus seres queridos, del porqué participaron en distintos acontecimientos.
«Sin ocultar la verdad y que la justicia no permita el chantaje, el soborno. Lo que nos queda es solidarizarnos con las víctimas de los familiares», indicó.
Rigoberta Menchú Tum recibió de manos del consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, su acreditación como observadora internacional para los comicios del 7 de junio próximo. La premio Nobel estará presente en Guerrero, acompañada de representantes de la Fundación Murrieta y Tendiendo Puentes A.C, organizaciones que la invitaron.
Previo a recibir su acreditación, Menchú Tum exhortó a los electores mexicanos a no vender su voto, porque hacerlo -dijo- es desprenderse de la dignidad y ello resulta lamentable para las futuras generaciones.
«Es una necesidad urgente el que se transforme una nueva ciudadanía y no debe haber trueque, eso de que ‘te doy mi voto pero me das tal’. Uno no se despoja del voto, sino de la dignidad, eso puede ser muy lamentable para las futuras generaciones», comentó.
Hizo un llamado para que se ejerza el voto y con ello se elija a los gobernantes, pero si no se está de acuerdo con la administración que se lleva, entonces hay que revocar el sufragio, pero de manera pacífica.
«Hoy estamos indignados por la violencia, por la corrupción, por las organizaciones criminales, porque estamos contra la pared, pero esto se resuelve entre todos», subrayó.