Como personas, tendemos a enfocarnos en lo positivo o lo negativo. Mientras que un grupo de personas son agradecidas por lo que tienen, muchas personas sólo piensan o hablan de lo que les falta, de lo que no tienen o incluso de lo que desean llegar a tener.
Tras el éxito de El secreto y la Ley de atracción, muchas personas deciden pensar en lo que desean para conseguirlo, pero ¿Por qué, entonces, no lo obtienen?
Porque la abundancia no tiene nada que ver con las fuentes tradicionales que nos dicen que se debe trabajar mucho, cumplir horarios, recibir cheques, pagar facturas o ganarse la lotería.
Lograr entrar en ese estado mental que permite que la abundancia llegue a tu vida en todos los aspectos es ir en contra de una programación que lleva años en la mente de las personas, y que les dice que no es posible lograr la abundancia en otra forma que no sea la establecida por la “realidad”.
Es decir, si no se tiene un trabajo fijo, con ciertas horas, si no se cumplen ciertas reglas o se funciona de acuerdo a lo que lo que tradicionalmente conocemos, entonces no se puede lograr abundancia.
La pregunta aquí sería, ¿cuántas personas conoces con abundancia y trabajos de 9 a 6? Quizás es tu caso, tienes un trabajo fijo pero quieres más abundancia en todos los aspectos de tu vida.
La clave está en cambiar la forma de pensar acerca de la abundancia. Y eso sí requiere un trabajo mental que incluya, una alta autoestima.
– para sentirte merecedor de más – un estado mental receptivo, confianza en lograr tus metas y la seguridad de que lo vas a tener.
Los pensadores en abundancia se enfocan en lo que es posible lograr, en lo que tienen y en lo que serán capaces de conseguir. Quienes piensan en escasez se enfocan en sus limitaciones, en su baja autoestima y en lo que no tienen. ¿A cuál grupo crees que le va mejor?
Si quieres tener abundancia en tu vida, es hora de cambiar tu forma de pensar y tu forma de sentir, de romper con esa programación que tiene años limitando tu abundancia y bienestar, es hora de pedir con seguridad y de recibir con gratitud todo lo bueno que la vida tiene para ti.