Cuarteto de Nos: 30 años de ser raros y bipolares

Con mucha potencia es como El Cuarteto de Nos regresó a México para hacer cantar, bailar y brincar al público del Plaza Condesa, quienes no dejaron de aplaudir y brindar cariño a los uruguayos.

Con las palmas al sonido de la batería es como, a las 20:15 horas, sus integrantes salieron al escenario con una producción minimalista sólo con los instrumentos y una pantalla detrás que proyectaba algunos gráficos para iniciar el repertorio con «El aprendiz», seguida de «Ya no sé qué hacer conmigo», que hizo levantar a todos los pies del suelo.

La energía siguió al tope con gritos como «Cuarteto, Cuarteto», a lo que respondieron con los acordes de «El hijo de Hernández» y «Enamorado tuyo», donde su líder Roberto Musso dejó los micrófonos aSantiago Tavella.

«Hola a todos, muy buenas noches amigos de México. Un placer estar acá que hace un tiempito como un poco más de año y medio que no veníamos, aunque tan igualitos que antes. La verdad hoy somos muchos más por suerte y eso quiere decir que nos van a tener mucho más seguido, No los aburro más y ahora presten atención y paren sus orejas que les va a hablar su propio espejo», saludó su vocalista Roberto.

Una verdadera fiesta fue la que la agrupación realizó en la presentación de su último disco de nombreHabla tu espejo, con temas como la que da título al disco o recuerdos del pasado con «Así soy yo», «Cuando sea grande» o «Breve descripción de mi persona».

Inundados de la irreverencia que caracteriza a sus letras conquistaron los oídos de chicos y grandes, pues varios niños fueron cargados en los hombros de sus padres para ver mejor en «Lo malo de ser bueno», «Algo mejor que hacer» o «No llora», primer sencillo de su reciente álbum.

De nueva cuenta Tavella dio voz a un tema viejo más viejo y tranquilo como «Pobre papá», pero la potencia volvió de la mano de

«Miguel gritar» y «Yendo a la casa de Damián», con la cual se despidieron.

Tras un momento de ausencia y ante el júbilo por un poco más por parte de los asaltantes que no se veían cansados de tantos saltos es que volvieron a los pocos minutos para deleitar a los fans que los esperaron por meses.

«Queridos amigos de México, queremos agradecerles por esta noche inolvidable que nos han hecho pasar; cada gotita de sudor valió la pena por estar con ustedes y siempre nos hacen sentir como en casa», se despidió Musso.

Así fue que la esperada «Me amo», «Buen día Benito» e «Invierno de 92» cerraron la velada que tuvo una duración de poco menos de dos horas, pues abandonaron el escenario a las 21:55 agradeciendo por el apoyo en 30 años de carrera siendo raros, bipolares y porfiados.