Pequeños detalles pueden cambiar tu desempeño hasta ¡para dormir! En las ciudades donde los espacios cada vez son más pequeños y la cama no tiene otra opción más que estar donde «cabe», surgen algunos problemas como cansancio, falta de concentración y mal desempeño. Ahora debes saber, todo es culpa de unos cuantos detalles.
Sonia Hernández-Montaño Bou, arquitecta, experta en feng shui y bioconstrucción, es la autora de una serie de consejos que permiten entender por qué los muebles donde descansas o concilias el sueño deben seguir algunas reglas. «Si observamos a los animales salvajes, la mayoría se orientan hacia el norte cuando quieren descansar. Los motivos están relacionados con la orientación magnética de la tierra y la polarización de nuestras células. La tierra es un enorme imán con dos polos, norte y sur, que generan un campo magnético. De él se derivan las líneas de fuerza que salen del polo sur (geográfico) y entran en el polo norte, cerrándose hacia el sur por el interior de la tierra, formando así un lazo», explica.
Ahora bien, «nuestras células están compuestas por electrones, con sus respectivas cargas positiva y negativa. Al dormir alineados con el norte facilitamos el descanso porque en esa dirección no interferimos con el flujo natural de la tierra, que va en dirección sur-norte. Un buen descanso garantiza una adecuada regeneración celular, salud y vitalidad». En este sentido, elegir dónde va la cama o dónde ponemos las almohadas no es una tarea que se deba tomar a la ligera, siempre debe ser al norte y nuestros pies al sur. Por los espacios o por dar mayor importancia a la estética, hay veces que este punto no se respeta, pero es importante conocer que existen otras variantes que también se deben revisar. El dormitorio ideal, dice la experta, es el más simple. Debe ser un lugar quito, tranquilo y sin estímulos, por lo que no es zona de estudio, en la cama no van los libros o computadoras. Se debe separar la zona de trabajo con la de reposo.
La autora llama «contaminación eléctrica» a todo aquello que está enchufado cerca de la cama, incluso aunque esté apagado. Asegura que para un buen descanso hay que evitar despertadores, lámparas con transformadores, celulares, routers wifi, teléfonos inalámbricos y cualquier otro objeto electrónico, toda vez que conllevan un campo de radiación que no permite descansar.
El miedo al «coco» hay que dejarlo en la infancia. «Para garantizar un buen descanso es básico que haya oscuridad para que el cuerpo pueda segregar melatonina, la hormona reguladora del sueño. Su producción es inhibida por la luz y estimulada por la oscuridad, por lo tanto está directamente relacionada con la cantidad de luz que recibe la retina. Es importante cerrar bien las persianas y acostumbrarse a dormir sin luz. También será positivo acostumbrar a los niños a dormir a oscuras», dice la colaboradora del sitio El Mueble. En cuanto a los ruidos, también se debe considerar limitarlos, por lo que, en caso de necesitarse, se debe recurrir a la construcción de dobles paredes, o el uso de materiales aislantes y absorbentes.
¿Tienes insomnio o cansancio? Si la respuesta es positiva, entonces habrá que ver cómo duermes.
