En un nuevo suceso científico en los más de tres años de su llegada a Marte, el robot Curiosity captó su primera puesta de Sol.
La mayor sorpresa fue que el ocaso en el planeta rojo se tornó azulado.
La coloración proviene del hecho de que el polvo muy fino es del tamaño adecuado para que la luz azul penetre en el ambiente con algo más de eficiencia”, explicó la NASA en un comunicado.
El vehículo espacial captó las imágenes a través de su cámara de mástil (Mastcam), durante una noche de observación del cielo el pasado 15 de abril desde el cráter marciano de Gale.
Cuando el polvo dispersa la luz azul, se queda más cerca de la dirección del Sol que la luz de otros colores. El resto del cielo es de color amarillo a naranja, colores con los que la luz se dispersa por todo el cielo en lugar de ser absorbida o quedarse cerca del sol», precisó la agencia espacial estadunidense.
La puesta de Sol captada por el Curiosity recuerda a las imágenes obtenidas por su hermano mayor, el Opportunity, que registró un ocaso similar en Marte en 2010
