«Mugre» en el cuello de tu hij@, ¡puede ser diabetes!

Las manchas en la piel de tu pequeñ@ pueden indicar problemas de salud. El oscurecimiento del cuello revela riesgo de diabetes en niños. ¡Atención a sus señales!
Pigmentación anormal de la piel
Todos nacemos con ciertas características (genéticas) que se expresan a través de los diferentes órganos, sistemas y tejidos. La piel, por ejemplo, tiene determinado color de acuerdo a la cantidad de células de pigmentación (melanocitos) que posee y a la irrigación de la sangre, lo cual también le «imprime» un tono especial.
En condiciones normales, la suma de ambos factores da a la epidermis una coloración saludable. Por el contrario, si algo no funciona como debe, algunas señales en ese extenso órgano que nos cubre ayudan a identificar el problema.
Tal es el caso de la acantosis nigricans, afección cutánea que si bien puede asociarse a gran variedad de alteraciones (benignas o malignas), generalmente se relaciona con un grupo de enfermedades que se caracterizan por presentar resistencia a la insulina.
Esto debido a que la incrementada concentración de insulina estimula a ciertos receptores celulares promotores de la proliferación de células de la piel.
En este sentido, recordemos que la insulina se encarga de que la glucosa que llega al torrente sanguíneo a través de los alimentos, ingrese al hígado, músculos y tejidos, a fin de almacenar energía.
Cuando el organismo no aprovecha esta hormona para cumplir sus funciones, el azúcar que consumimos tiende a concentrarse en el flujo sanguíneo, lo cual es señal de diabetes tipo 2, afección que en los últimos años reporta creciente número de casos en la población infantil.
Riesgo de diabetes en niños
El efecto de factores externos, como consumo abundante de comidas ricas en grasas y carbohidratos, aunado a ejercicio físico limitado, ha contribuido al aumento de diabetes en niños, debido a que los hábitos mencionados multiplican las posibilidades de conducir al individuo a la obesidad y, con ello, crece también el riesgo para desarrollar el padecimiento.
De manera que cuando se descubren manchas en la piel del niño no deben interpretarse como falta de higiene.
Lo que sucede posiblemente es que estas zonas de tejido de color gris-parduzco (condición también llamada acantosis pigmentaria) estarían indicando que el pequeño tiene resistencia a la insulina, sobre todo si también presenta problemas de sobrepeso.
En este caso son necesarias «grandes» cantidades de insulina para controlar la glucosa en rangos normales.
Esta es la razón por la que se observa oscurecimiento de la piel del cuello, aunque también es posible notar que la piel se vuelve más gruesa y oscura alrededor de las articulaciones y en áreas con pliegues y arrugas (axilas, codos, rodillas y nudillos, por lo que se ve como «mugre en el cuello»). Si el problema no se atiende, el páncreas se agota por este esfuerzo y se presenta la diabetes.
Mi hij@ tiene manchas oscuras en la piel
La acantosis nigricans no es afección que se contagie o ponga en peligro la vida; sin embargo, cuando un menor de edad muestra pigmentación anormal de la piel conviene llevarle al médico para conocer la causa exacta y posible tratamiento, especialmente en niños con sobrepeso, condición que por sí misma requiere atención especial.
Las medidas que generalmente comprende el tratamiento de acantosis nigricans pueden incluir:
Productos tópicos.
Es posible que el médico recete lociones o cremas para aplicar sobre la parte afectada, las cuales deberán usarse de acuerdo a sus indicaciones.
Al respecto, vale la pena señalar que, aunque existen numerosos productos que se anuncian en la televisión y prometen acabar con las manchas o hiperpigmentación en cuello, es poco probable que funcionen y, por el contrario, irritan la piel.
Así que además de representar un despilfarro, solamente alterarán más la salud del pequeño.
Peso saludable. Combatir los kilos de sobra es tarea útil para cualquier infante, ya que permite que sus órganos y tejidos funcionen correctamente. De manera que si tu hij@ presenta obesidad infantil y oscurecimiento de la piel del cuello, ayúdal@ a mantener un peso saludable a través de una dieta equilibrada y la práctica de actividades físicas que le diviertan y mantengan en movimiento (el ejercicio puede hacer que su cuerpo aproveche mejor la insulina).
Hábitos saludables. Para controlar el peso de un niño, sus hábitos al alimentarse son grandes aliados.
Por ejemplo, evita que coma frente a la TV o la computadora, y procura que lleve a la escuela refrigerios a base de frutas y verduras frescas (de preferencia, en su presentación natural, ya que contienen más fibra).
Además, debes eliminar de su menú refrescos, dulces, hamburguesas, papas fritas y cualquier alimento con exceso de grasa y/o calorías. Visita al médico.
Los niños con sobrepeso u obesidad tienen más probabilidades de desarrollar pigmentación anormal de la piel que a menudo mejora o desaparece cuando adelgazan, razón suficiente para visitar al médico ante cualquier señal de acantosis nigricans.
Si se diagnostica esta condición, es posible que se realicen análisis de sangre u otras pruebas para determinar la causa o evaluar otras enfermedades (diabetes tipo 2) que ocurren más a menudo en personas con acantosis pigmentaria.
En la mayoría de casos, mantener un peso saludable haciendo ejercicio con regularidad y comiendo saludablemente son medidas efectivas que constituyen útil guía para padres que se preguntan cómo prevenir la acantosis nigricans en los niños.