Promiscuidad y fidelidad: Las claves del comportamiento humano

Cuando se trata de sexo los seres humanos nos dividimos en dos categorías fundamentales: promiscuos o fieles, según se desprende del último estudio de la Universidad de Oxford (Reino Unido) que representa la primera evidencia científica que respalda las teorías que dividen a las personas en estas dos grandes categorías al contrario de como sucede con otros mamíferos (que o son polígamos o son monógamos).
¿Por qué los seres humanos somos las excepción a la regla entre los mamíferos? Para su estudio, los expertos analizaron dos indicadores potenciales de la conducta sexual. Primero, un grupo de 585 personas de entre 18 y 63 años cumplimentaron un cuestionario sobre hábitos sexuales. Segundo, analizaron los datos de una investigación (con 1.314 hombres adultos) basada en lo que se conoce como el “índice 2D: 4D” que mide el cociente entre las longitudes de los dedos índice y anular como un indicador estadístico de nuestra sensibilidad a la testosterona. Así, cuanto más largo sea el dedo anular en comparación con el índice, mayor es la probabilidad de concentración de testosterona; lo que también se ha asociado a una mayor inclinación hacia la promiscuidad.
El estudio comparativo de ambos datos, publicado en la revista Biology Letters, reveló que el 57% de los hombres tenía más probabilidades de ser promiscuo y el 43% fiel. Respecto a las mujeres, el porcentaje se invirtió: el 47% tenía más inclinación hacia la promiscuidad y el 53% a la fidelidad.
Según los científicos, a pesar de que hay que tomar estos datos con cautela, “el comportamiento humano está influenciado por muchos factores, como la experiencia de medio ambiente y de la vida. Esta investigación sugiere que puede haber dos tipos distintos de personas dentro de cada sexo que buscan diferentes estrategias de apareamiento”, explica Robin Dunbar, líder del estudio.