Una temporada difícil que contó con la ausencia en su gran mayoría de Kevin Durant, no fue suficiente para que Oklahoma City despidiera a Brooks
Oklahoma City Thunder anunció hoy el despido del entrenador Scott Brooks en un intento de progresar la próxima temporada de la NBA, la última de contrato del astro Kevin Durant con el equipo.
«Decidimos que para estimular el progreso y estar en la mejor posición posible la próxima temporada y mientras miramos al futuro, era necesaria una transición de este tipo» , dijo en un comunicado Sam Presti, mánager general de los Thunder, subcampeones de la NBA en 2012 y que esta temporada no se clasificaron a los playoffs tras sufrir una plaga de lesiones.
El despido de Brooks es «necesario en este momento para seguir evolucionando» , dijo Presti, que recordó que el objetivo es ganar un título.
Brooks fue nombrado entrenador el 15 de abril de 2009. En siete temporadas logró un balance de 338-207 (62 por ciento de victorias) y fue elegido entrenador del año en la temporada 2009-10. Llevó al equipo a tres finales de la Conferencia Oeste (2011, 2012, 2014) y a una de la NBA, perdida en 2012 ante Miami Heat.
«Apoyo la necesidad de una transición a un nuevo técnico que nos permita continuar con el crecimiento y el progreso que nos ayudarán a lograr todas nuestras metas» , dijo Clayton I. Bennett, presidente de los Thunder, que inician ya la búsqueda de un nuevo entrenador.
El equipo de Oklahoma City ha sufrido la baja casi toda la temporada de Durant y en la recta final de la campaña la del pívot congoleño de pasaporte español Serge Ibaka. En febrero remodeló parte de su plantilla con la llegada, entre otros, del pívot turco Enes Kanter.
Pese a que Russell Westbrook asumió el mando dejado por Durant y fue el máximo anotador de la NBA, los Thunder quedaron fuera de la pelea por el título por primera vez desde la temporada 2008-2009 con un balance de 45-37.
La próxima campaña será la última de contrato de Durant, que al finalizarla será agente libre y se convertirá en la estrella más codiciada de un mercado que se llenará de millones con la entrada en vigor del nuevo contrato televisivo, que seguramente llevará a que se eleve el límite salarial que pueden gastar los equipos y a que aumente así la cantidad de dinero que ganen los jugadores.