En Medio del Eje del Terror

Con toda la razón del mundo, mis amigos internautas, twitteros y blogueros –con quienes convivo casi a diario– andan más preocupados por la seguridad nacional que los entorchados de Atracomulco.
Es la hora en que ya nadie sabe, de acá de este lado, quién es, o quiénes son los responsables de los asuntos estratégicos de la seguridad nacional que resguardan nuestro presente y futuro ante las acechanzas del exterior.
Los secretarios del ramo andan tan metidos en agarrarse a la greña todos los días en los medios y entre la oficialidad media de las nóminas, que creo ni tiempo tienen para reflexionar, aunque sea un minuto, sobre asuntos delicadísimos que traemos como espadas de Damocles sobre nuestras cabezas.
El encargado de los asuntos del Consejo Nacional de Seguridad Pública ?y de lo que antes eran las policías federales y de caminos y puentes, Monte Rubido, anda de riguroso plantón en algún lugar de la súper a Acapulco, «por los caminos del Sur», dijera Agustín Ramírez, acompañado de un ejército ?de valedores tan emperifollados que da miedo preguntarles sueldos y viáticos.
¿A qué se dedica el prócer Rubido? Se la vive cazando grupos impertinentes de campesinos y dizque maestros que desean ingresar furtivamente a los tramos de peaje obligatorio para subvencionar con las cajas registradoras y los contenido$ sus pato-aventuras.
Dicen que sufre cientos de amagos quincenales de ingresos furtivos de los «padres de Ayotzinapa», CNTE, CETEG y sindicatos de trabajadores burocráticos de Guerrero, que a la menor provocación quieren entorpecer la circulación y alzarse con el santo y las limosnas de las apetitosas casetas de la autopista del Sol, «para que no muera su pretexto» reivindicatorio.
Sí usted le añade al intento la consigna de cancelar las elecciones en los dos distritos de Guerrero que pueden paralizar el 7 de junio, se encuentra , estimado lector, frente a un cla-rí-si-mo caso de alta seguridad nacional.
Que pa’cabarla de chingar, tiene enteleridos tanto al INE del inútil hijo de Arnaldo, que de cualquier gancho se ahorca, como al eficientísimo verbo parlante ministro (?) de Gobernación, quien cree dirige atinadamente las operaciones de este raro chicle motita de claro perfil timbiriche.
Meade, Mondragón?, Chuayffet y el hijo de Arnaldo Córdova quieren más protección para ellos, sus familias y sus amigochos. ¡Uff, qué problema!
En la Defensa, sólo interesan las compras
Por el lado de mi general secretario de la Defensa Nacional, tiempo le falta para revisar las listas de peticiones de vituallas, uniformes, alimentos y enseres de fajina que tiene que revisar puntualmente, como lo hizo desde su posición de adquisiciones durante los pasados seis años. Y usted sabe, las costumbres se quedan.
Asimismo, debe revisar puntualmente donde estuvieron las fallas de filtraciones e informaciones confidenciales que dieron al traste con la alta seguridad nacional que ha blindado al Ejército, como para que se colaran las razones secretas que los convocan todos los días a reuniones confidenciales.
¿Quién fue el verdadero chivato que llevó a estampar en los reportes periodísticos las infamias de Tlatlaya, tanto las ejecuciones en las bodegas, como el contenido de las maletas, como el involucramiento de oficiales de alta graduación en la expedición de las órdenes sobre la masacre?
¿Dónde estuvo la falla del impecable ?mutis que se había sellado con las fuerzas del orden local y estatal en los asuntos de Iguala y Cocula, para que nunca llegara a saberse ni el motivo, ni el cuándo, ni el cuánto de la operación?
¿Cómo hay que hacerle para que ninguno de los güeros vaya a ser molestado ni con la pata de un ciempiés , pues estos babosos de las organizaciones de sicarios rurales ya están aburridos de esa mensada y quieren salir de esa puesta en escena para ir por sus moches?
Ahora son nanas, lo elementos del Estado Mayor
Por el lado de mi general Miranda, pues le estamos quitando mucho tiempo valioso que tiene que dedicar al cuidado y a las pachangas de la familia política, pues ya ve usted que están en edad de merecer y pues, no hay derecho…
Tiene que estar metido de lleno en la logística del cuidado de las casas ejem, de los bisnes de los juniors y de los primos, no sea que la vayan a cajetear y salpiquen la investidura, y ya nos dijo que no está el horno para bollos.
Que ya también el jefe Nuño le está encargando asuntos de la mayor trascendencia para la República. Desde ahorita tienen que andar aplicando resentidos y acelerados que sienten que ya los abandonó la Virgencita?. Que cada día que pasa, la señora se preocupa más por el tipo de gente que se les cuela en Los Pinos, y hasta de los que piden los transportes y hasta los aviones del Estado Mayor para todo tipo de ocurrencias y ligues transatlánticos o en el gabacho del norte. Que ya no es vida. Que no les alcanza la estructura del Estado Mayor para tanto encargo.
Que también Soberón, el de la Marina Armada, ya solicitó algunos tiquismiquis que tiene que avituallarse para andar a la moda en eso de la seguridad nacional.
Y el jefe Nuño ya le mandó nuevos redactores, speechwriters para cada ocasión oficial, así como expertos cuidadores de posiciones de imagen con teleprompter al frente, pero al Almirante no se le da la pompa y circunstancia.
Como siempre fue secretario particular del Titular, esto no es lo suyo. Él lo que sabe es obedecer, y dice que a segundo nadie le gana, pero de eso a ser el protagónico, hay un buen trecho y que no contemos con él.
Que a él con que le tengan lista y bien pagada a su Orquesta de marinos y a sus guaruras personales que acompañan a las de la compra del mercado, le basta y le sobra para hacer un papel decoroso defendiendo a las instituciones y al mar patrimonial.
McCaffrey: Somos la principal amenaza a EU
En esas estaba la discusión de altos asuntos estratégicos de seguridad nacional –que nunca, que nadie por más que lo haya dicho, ha atendido en este país, y todavía no nos han dicho por qué–, una sola declaración nos ubicó en la realidad.
«Los narcotraficantes mexicanos son tanto o más peligrosos que los extremistas del grupo terrorista ISIS (Estado Islámico), advirtió Barry McCaffrey?, quien de 1996 a 2001 fue el zar antidrogas de Estados Unidos».
La perla negra la soltó durante una serie de audiencias sobre seguridad fronteriza (con México) en el Senado estadounidense. Nos recordó que la relación bilateral es la continuación de la guerra.
Nos recordó que estamos papando moscas y que no estamos en ningún lado. Nos hizo saber que cambiaron la amenaza comunista del macarthismo por la del narcotráfico. Nos metió de lleno cómo carne de cañón en el nuevo eje del mal.
Nos hizo saber, como buen halcón republicano que siempre ha sido, cercano a la familia Bush, que nuestro petróleo ya no les interesa. Vienen por todo lo demás de los recursos que todavía valen, y sobre todo, a echarnos la culpa de cualquier desgracia que les pueda pasar de hoy en adelante.
¿Que exagero? Entonces por qué dijo, cito textual: «para Washington el punto más débil del país sigue siendo la frontera con México, ya que siete de ocho carteles mexicanos operan a través de Texas, sumando a pandillas transnacionales y de todo el Estado para que los ayuden en su tráfico de drogas y de personas».