Al arrancar la VII Cumbre de las Américas, ante los presidentes Raúl Castro y Barack Obama, el presidente Enrique Peña Nieto declaró a México como «aliado» del proceso de normalización de las relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos.
Al participar como orador en la inauguración de este encuentro regional, subrayó que esta cita es histórica porque están presentes los 35 Estados que conforman la región y por el restablecimiento del diálogo de dos grandes amigos de México: Estados Unidos y Cuba. «Nuestro país apoya, reconoce y se asume aliado de este proceso de diálogo y entendimiento.
Los líderes de ambas naciones le han recordado al mundo que la apertura al diálogo está cargada de futuro y posibilidades». Se manifestó por seguir impulsando el diálogo político como instrumento de entendimiento entre las naciones de la región.
Asimismo, al fijar posiciones de México sobre la región, dijo que su gobierno da el más amplio reconocimiento al proceso de paz que esta viviendo Colombia, «así como al anhelo de que la paz total se concrete muy pronto, cuanto antes mejor». Asentó que México respalda a Colombia en este proceso y desea que la comunidad internacional acompañe «este noble propósito con ánimo constructivo para facilitar los acuerdos».
