Todo redunda en lo social

Son grandes lecciones de vida las charlas con los choferes de taxi de la Ciudad de México y ya más de uno, me ha manifestado que de votar: ¡Nada! Que esta vez va en serio.
No sólo los taxistas, sino muchos más mexicanos tienen la sensación de que somos unos títeres de nuestros gobernantes y que cada vez hay más trabas y hasta cobros excesivos en impuestos para desarrollar nuestras actividades de trabajo.
Lo anterior es una pequeña muestra de que contrario a lo que algunos piensan respecto a que lo electoral puede separarse de otros escenarios de la vida real; eso es imposible.
De hecho en cada campaña electoral, los partidos políticos hacen ofrecimientos a sus posibles votantes con promesas de cambios en lo social, la justicia y lo económico. ¿Por qué pensar con seriedad que lo electoral puede desmarcarse de la cotidianidad?
Además, son los elegidos por los electores los que tienen en sus manos los destinos de los mexicanos, es por eso que lo electoral no puede separarse de todo lo anómalo que sucede en el país.
La desconfianza que impera hoy en día del pueblo de México para con quienes nos administran, nos gobiernan y hasta imparten justicia; necesariamente se reflejará en la acción de sufragar el próximo domingo 7 de junio.
El fantasma del abstencionismo no sólo se pasea ya en las zonas del país amenazadas por la inseguridad, también en cualquier parte de la geografía nacional en donde algún posible elector se sienta olvidado y hasta ofendido por los actores políticos.
Ni todos los spots partidistas podrán contrarrestar la terrible realidad que ahora mismo se vive en México y que se enmarca en los propios discursos tanto del presidente del país, Enrique Peña Nieto y del secretario de Hacienda, Luis Videgaray; en cuanto a que las finanzas nacionales están en aprietos, para lo que se nos pide a todos a la vez, hacer ajustes a nuestra ya de por sí, sangrada economía doméstica.
–¿Votar? Me dijeron ayer.
–Para qué. De todos modos nos tienen jodidos y sometidos.
Acta Divina… Lorenzo Córdova, presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), advierte que la jornada electoral no va a resolver al día siguiente los problemas de la población.
Para advertir… Señor Córdova: ¿En qué momento los resultados de una elección resolverán los problemas nacionales?