Del anonimato, ¡a líderes de goleo!

Mientras los equipos “grandes” pueden presumir que la historia y la afición les pertenece, los clubes que carecen de tal etiqueta anteponen el ojo clínico para fichar delanteros.
En los últimos años y justo como sucede en el Clausura 2015, los líderes de goleo difícilmente surgen de América, Chivas, Cruz Azul o Pumas, sino de otros como Veracruz y Puebla.
Porque si hoy son el escualo Julio Furch o el camotero Matías Alustiza quienes encabezan la clasificación de romperredes, en torneos anteriores los campeones fueron Camilo Sanvezzo (Querétaro), Mauro Boselli (León) Enner Valencia (Pachuca), Pablo Velásquez (Toluca) o Esteban Paredes (Atlante).
Entre ellos, la única excepción fue el azulcrema Christian Benítez, cuyo primer título de goleo no fue con las Águilas sino en Santos.
Si Sanvezzo llegó a México desde el futbol canadiense, por ejemplo, Furch lo hizo desde el poco conocido Belgrano argentino, mientras Alustiza tardó en encontrar la consistencia, luego de incluso un pase poco exitoso por el Pachuca.
El balompié mexicano se acostumbró de manera sorpresiva a encontrar apellidos poco conocidos como sus mejores goleadores.
Buena parte de ellos iniciaron sus propias campañas de gloria con poco cartel, desplazando a los consagrados que desde lejos los vieron subir escalones en la clasificación de romperredes.
Con 8 Jornadas disputadas esta campaña, ni siquiera son los estelares Darío Benedetto (América) Omar Bravo (Chivas), Dante López (Pumas) o el lesionado Roque Santa Cruz (Cruz Azul), quienes acechan a los líderes.
Después de Furch y Alustiza con 6 goles, quienes ocupan los siguientes escalones con 5 tantos son Dayro Moreno (Xolos) o Avilés Hurtado (Jaguares).
El América es el “grande” que más ha dado batalla en ese rubro, con los tres títulos de goleo de Benítez entre 2012 y 2013, además del de Ángel Reyna en el Clausura 2011.
Sin embargo, el último de Chivas ya luce añejo, pues lo conquistó Javier Hernández en el Bicentenario 2010, justo un semestre después del más reciente de Cruz Azul, con Emanuel Villa en el Clausura de ese año.
Peor es el caso de Pumas, cuyo campeón más reciente fue Bruno Marioni hace más de una década, en el Clausura 2004.
Por ello no son los delanteros quienes suelen darle brillo a la Tabla de goleo, sino ésta quien le da renombre a sus líderes.