La evolución de la economía mexicana registró un dinamismo lento durante enero de 2015, particularmente por el débil desempeño del mercado interno, informó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Además, advirtió que el reciente recorte al gasto público anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público la semana pasada, es un riesgo para el desenvolvimiento de la actividad productiva en este año.
Al presentar el indicador IMEF Manufacturero, el instituto reveló que aumentó 0.9 unidades en enero de este año, con relación al mes anterior, para ubicarse en 50.9 puntos. El indicador manufacturero es un reflejo cercano del sector exportador, principalmente del orientado a las manufacturas.
Esta mejoría se debió al repunte de las exportaciones manufactureras, el cual estuvo relacionado con los buenos resultados en la economía de Estados Unidos. Aunque se prevé que el crecimiento en el PIB estadounidense se mantenga, el IMEF advirtió que persiste un riesgo a la baja por la debilidad económica en Europa y el menor dinamismo en algunos países de Asia.
«Se espera que la recuperación reflejada en la industria de la construcción en México tenga un impacto positivo en el crecimiento de la economía. Sin embargo, el reciente recorte al gasto público anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Publico podría representar un riesgo a la baja para la actividad económica.
«Por su parte, el mercado interno continúa recuperándose lentamente, en particular el consumo privado», detalló el IMEF.
Por su parte, el indicador no manufacturero, que refleja el dinamismo de la actividad económica, principalmente del sector servicios y comercio, registró una caída de 0.8 puntos en enero, lo que ubicó al índice en 49.2 unidades. Por segundo mes consecutivo el indicador permaneció ligeramente por debajo del umbral de 50 puntos, lo que indica que tanto el sector servicios y comercio mantendrán un débil desempeño.
Asimismo, el consumo interno y las ventas minoristas continuaron registrando crecimientos moderados, que a decir del IMEF, es consistente con la débil recuperación en la confianza del consumidor. «Si bien se espera que la recuperación continúe, se considera que seguirá siendo de forma paulatina y desigual entre sectores, así como sujeta a varios factores. Entre ellos destacan que se mantenga la dinámica en Estados Unidos, que Europa no registre un nuevo retroceso y que las economías asiáticas no disminuyan adicio-nalmente su dinamismo. «Persiste como factor de riesgo la volatilidad que pudiera generarse en los mercados financieros por la eventual normalización de la política monetaria en Estados Unidos, que significaría un eventual incremento en las tasas de interés.
, así como una caída en los términos de intercambio en muchos países», concluyó el IMEF.
