Zapata Perogordo pide al PRI dejar de ser partido de Estado

Alejandro Zapata Perogordo, precandidato a la gubernatura del Estado por el PAN, lamentó la situación interna del PRD que no logra construir una candidatura; criticó al PRI y lo conminó a dejar de conducirse como partido de Estado; y llamó a poner fin a las trifulcas entre calderonistas y maderistas dentro de su partido.

“Está el PRD lamentablemente pasando por un bache”, dijo el aspirante albiazul y se pronunció por la existencia de “una izquierda sólida, moderna y progresista, porque es indispensable para “una profunda reforma de Estado en San Luis Potosí”.

Zapata Perogordo explicó que para que se de dicha reforma es necesaria “una apertura de pluralidad que tiene que venirse dando con un movimiento social, un movimiento cívico donde podamos hacer un resideño político, el régimen actual ya no funciona, los incentivos son perversos”.

Y es que para el precandidato albiazul a la titularidad en el Ejecutivo estatal, es imperioso “desterrar el régimen para que el PRI se convierta realmente en un partido político y no solamente un partido de Estado como ocurre en San Luis Potosí”.

Sobre las reyertas políticas que se han generado dentro del PAN, luego de la exclusión en las listas plurinominales de Margarita Zavala, esposa del ex presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, y sí de la inclusión de Gustavo Madero Muñoz y del regreso de éste a la dirigencia nacional, Alejandro Zapata Perogordo dijo que no bastan los llamados a la unidad, sino que deben ir acompañados de acciones y actitudes, además de una gran dosis de humildad.

“Espero que esas diferencias se tenga la capacidad suficiente para superarlas, en el PAN siempre hemos tenido libertad de expresión, tenemos estatutos, nuestros principios de doctrina y todos tenemos que ser humildes y generosos porque nosotros pregonamos la formación de ciudadanos, pregonamos que debemos ser escuela de democracia, y en ese sentido es donde tenemos que luchar y a veces nos extraviamos con diferencias personales que no nos conducen prácticamente a nada más que el denostarnos unos a otros”, culminó.