Luego de que se ha observado que la Reforma Hacendaria propuesta por el gobierno de Enrique Peña Nieto ha provocado problemas financieros al país, para el ciudadano común y mayormente para el sector empresarial dedicado al comercio, a la construcción e inmobiliario, los panistas continuarán manifestándose en contra de la ley fiscal, al considerar que atenta contra la economía nacional, indicó el diputado local, Rubén Guajardo Barrera.
Las quejas más sentidas tienen que ver con la homologación del IVA, que ha provocado el cierre de industrias, se ha perdido el poder adquisitivo en un 12 por ciento, se han dado de baja miles de trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social, se da una menor deducibilidad de impuestos, además de que se están afectando las prestaciones sociales de los trabajadores, por ello insiste en apoyar la contrareforma hacendaria que promueve su partido político.
Miles de pequeños, medianos y grandes empresarios principalmente del Distrito Federal, Jalisco, Nuevo León, Morelos, Estado de México, Yucatán, Baja California, Sinaloa, Coahuila y Sonora, se inconformaron por esta modificación a la ley de Hacienda e interpusieron una serie de amparos por considerarla nociva para el crecimiento financiero de la nación y ante esto los panistas nunca se han quedado atrás, ya que desde un principio se pronunciaron en contra y la fue rechazaron rotundamente.
Ahora el representante del octavo distrito local coincide con las serie de medidas que se habrán de establecer en el Senado de la República por parte de los integrantes del blanquiazul, para señalar que no se han registrado alcances positivos con la entrada en vigor -hace diez meses- de esta reforma federal. Su postura es de sumarse a la contrareforma y si no se logra en este periodo legislativo en el siguiente se le debe dar continuidad para eliminar los aspectos negativos que no abonan a la economía mexicana.
A su consideración la ley fiscal es tóxica y dañina, porque está generando grandes desequilibrios sociales, además de que atenta contra de las finanzas de las familias de escasos recursos y del propio sector de la iniciativa privada.
“Es una lucha que tenemos que hacer este año y poner nuestra postura en contra de esta reforma, porque ha frenado el crecimiento, ha habido problemas fiscales, como que antes no se cobraba un impuesto al transporte foráneo, lo que sale cada vez más caro y le pega directamente a los bolsillos de los potosinos”.
