Expertos reconocen que vacuna o cura del Sida está lejos

La atención temprana a los infectados con VIH constituye una triple victoria en la lucha contra la epidemia del Sida: los mantiene saludables, reduce la posibilidad de que infecten a más personas y ahora las investigaciones muestran que es una buena inversión financiera.
La Conferencia Internacional del Sida concluyó el viernes con el mensaje de que aumentar el número de personas que reciban tratamiento entre los 34 millones de infectados con el VIH es crucial para frenar la epidemia ante el hecho de que una vacuna o una cura aún está lejos.
«Es inaceptable» que las terapias científicamente probadas y las guías de prevención no lleguen a las personas que más las necesitan, dijo en la sesión de clausura de la reunión el Premio Nobel, doctor Francoise Barre-Sinoussi, codescubridor del virus que causa el Sida y nuevo presidente de la Sociedad Internacional del Sida, informa Notimex.
Por su parte, el ex mandatario estadounidense Bill Clinton, cuya fundación financia acciones contra el VIH, participó con un discurso.
«Todos ustedes han creado la posibilidad de que podamos tener una generación libre del Sida», dijo. «Sólo tenemos que persistir».
Ampliar el número de personas que reciban tratamiento será muy costoso al principio, pero esto redundará en el transcurso de cinco años en un ahorro de recursos para Africa del Sur, una región muy azotada por la enfermedad. Los investigadores de Harvard dijeron el viernes que el ahorro en los tratamientos de enfermedades relacionadas con el Sida superará el precio de los medicamentos.
El gasto durante décadas en atención médica para millones de personas rebasará al final cualquier ahorro, por eso el tratamiento como prevención continúa siendo sumamente eficaz en función del costo, indica el Centro Harvard para la Investigación del Sida.
«La gente solía creer que no había manera de que pudiéramos encontrar alguna vía», dijo la doctora Diane Havlir, de la UniverSidad de California en San Francisco, que copresidió la reunión más grande contra el Sida efectuada en el mundo.
Con el aval científico y financiero, «por primera vez somos optimistas de que podemos lograrla», apuntó.
Sin embargo, recientes estadísticas difundidas en Estados Unidos muestran la riguroSidad de las eficacia de los tratamientos, incluso en los países desarrollados.
En estas naciones, la mayoría de los pacientes tienen acceso a tratamiento y de acuerdo con los lineamientos el mismo debe ofrecérseles de inmediato tras el diagnóstico.
Sin embargo, apenas uno de cada cuatro de ellos logra que sus infecciones le sean controladas, dijo el viernes el organismo estadounidense Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).
Los jóvenes y las personas negras afrontan la peor situación.
«Ahora necesitamos pensar en grande» para aumentar el número de quienes reciban atención, señaló el doctor Kevin Fenton, director del centro para el Sida del CDC. «Tenemos las herramientas. Ahora necesitamos trasladarlas a las políticas del mundo real para que incidan en las vidas de quienes más las necesitan», indicó.
En Estados Unidos, donde las leyes de patente implican costos más altos para los tratamientos contra el VIH que en los países pobres, podría haber en breve una reducción de precios.
En la actualidad, un sola píldora diaria que combina tres fármacos es el tratamiento de primera elección cuyo costo asciende al año a unos 15,000 dólares.
Se prevé la próxima salida al mercado de una versión genérica de uno de esos medicamentos, el efavirenz.
Las autoridades de Salud de Estados Unidos dijeron que sólo una cuarta parte de los infectados en ese país con el VIH tiene controlada la infección.
La cifra del 25% de los estadounidenses que reciben la atención adecuada es menor a datos anteriores y significa que al menos 800,000 personas no toman los medicamentos que les disminuirían el nivel de la infección.
Los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades indicaron que ello se debe a que casi el 20% desconoce que tiene el virus y en que únicamente dos terceras partes de quienes saben que están infectados van con el doctor. Dijeron también que, en este último caso, la pobreza y la falta de seguro de gastos médicos son los principales obstáculos.
El 15% de las personas de 25 a 34 años han logrado controlar el virus hasta mantenerlo en niveles bajos, menos de la mitad de la tasa entre los individuos de 50 años o más. Y el 20% de los afroestadounidenses lograron suprimir el virus, en comparación con el 30% de los blancos.