Seguramente has oído que la exposición a pantallas antes de acostarte puede afectar tu sueño. Sin embargo, una nueva investigación sugiere que el problema es aún más grave.
Leer desde un iPad antes de acostarte no sólo hace que sea difícil conciliar el sueño, sino también afecta que tan somnoliento y alerta estarás al día siguiente, de acuerdo con una nueva investigación de Brigham and Women’s Hospital.
La nueva investigación apoya las conclusiones de estudios anteriores, que también han encontrado que el tiempo frente a una pantalla antes de dormir puede ser perjudicial.
El estudio, publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, explica que los hallazgos podrían afectar a cualquier persona que utilice un lector electrónico, ordenador portátil, teléfono inteligente, o ciertos televisores antes de dormirte.
La nueva investigación apoya las conclusiones de estudios anteriores, que también han encontrado que el tiempo frente a una pantalla antes de dormir puede ser perjudicial.
Pero si no quieres sentirte como un zombie durante el día, las conclusiones son claras: leer un libro impreso real estimula tu mente antes de acostarte.
El estudio se prolongó durante dos semanas e incluyó a 12 participantes que leán en un iPad durante cuatro horas antes de acostarse durante cinco días seguidos, un proceso que se repitió con los libros impresos. Para algunos, el orden se invirtió: comenzaron con los libros impresos y se mudaron a iPads después.
A los lectores en iPad les tomó más tiempo quedarse dormidos, y tuvieron menos sueño por la noche en comparación con los lectores de libros, descubrieron los investigadores.
Los lectores de iPad secretaron menos melatonina, que ayuda a regular el sueño. Y también estuvieron más cansados que los lectores de libros al día siguiente, incluso cuando ambos tuvieron un total de ocho horas de sueño.
LA CONCLUSION
Los dispositivos retroilu-minados suprime la mela-tonina hasta en un 22 por ciento. Lo cual quiere decir que puede generar problemas para dormir por la noche.
Así que ya sabes cuál puede ser el origen de tus problemas para dormir.
