Ante la inminente llegada de su hermano, Milan disfruta de sus últimas semanas como el “rey” de la casa. Ante la mirada orgullosa de sus padre, Shakira y Piqué, el niño (que está a punto de cumplir dos años) deleitó a su familia durante la función navideña del colegio, una cita imperdible para la cantante y el futbolista quienes son unos papás muy involucrados en la educación y crianza de su primogénito.
Además de sus padres, Milan contó con otro público de lujo, integrado por sus abuelos maternos William Mebarak y Nidia Ripoll, quienes aplaudieron desde la primera fila su actuación. En el evento escolar también estuvo presente Tonino, el hermano de la cantante, quien está encantado con su papel de tío.
Las cámaras de ¡HOLA! TV captaron a la familia mientras salía del festival infantil, con una sonrisa que delata lo encantador que tuvo que haber estado Milan.
La dedicación de su mamá y el cariño de su papá, han hecho que el niño crezca desarrollando al máximo todas sus aptitudes.
Recientemente, la intérprete de “Para amarte” habló de lo despierto que está Milan, a quien han expuesto a siete idiomas diferentes aprovechando su etapa como “esponjita” (de acuerdo con especialistas antes de los cuatro años, los niños desarrollan el 85 por cierto de su cerebro), una etapa en la que Shakira ha estado muy al pendiente de su bebé.
Hace unos meses, la cantante colombiana compartió un breve video en el que se ve a su hijo en su primera lección de lectura (un ejercicio de asociación con el que comenzó a enseñar a su bebé las letras), clase en la que el pequeño aprendió a “leer” las palabras “mamá”, “papá” y “teta”. Impulsada por la curiosidad de saber más sobre el crecimiento de los bebé, recientemente Shakira se unió con la firma infantil “Price school” con quien creó una nueva línea de juguetes encaminada al desarrollo y educación de los pequeños, un tema que la apasiona desde que debutó como mamá. Desde el día uno en la vida de Milan sus padres han querido incorporarlo en todas las actividades familiar, sólo hace falta recordar la en-ternecedora camiseta del Barcelona que el equipo, del que ya es socio el niño, le envió el día de su nacimiento.
