Al menos quince yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) murieron hoy y decenas resultaron heridos en bombardeos de la coalición internacional y de las fuerzas kurdas contra sus posiciones cerca de la estratégica presa de Mosul, en el norte de Irak.
El responsable de seguridad del embalse, Muhedin al Mazuri, dijo a Efe que los aviones de la coalición -liderada por EU- atacaron varios objetivos del EI en las aldeas de Al Shiha y Jerab Kober, siete kilómetros al sur de la presa.
Las fuerzas kurdas «peshmergas» bombardearon además con artillería las mismas posiciones hasta la madrugada de hoy, según Al Manzuri, que señaló que entre los heridos hay muchos graves.
La Fuerza Especial Combinada de EU para la Operación Determinación Inherente contra los yihadistas informó de que en los últimos días ha efectuado tres bombardeos cerca de Mosul, donde se destruyeron una posición de combate, tres unidades tácticas y una ametralladora pesada.
El EI ha intentado en varias ocasiones el pasado noviembre y a principios de este mes recuperar el control de la presa, pero no lo ha logrado debido a los intensos bombardeos que han causado decenas de bajas en sus filas.
Esta instalación hidráulica, la más importante del norte de Irak, estuvo en manos de los yihadistas durante veinte días entre finales de julio y agosto, hasta que las tropas kurdas recuperaron su control.
El EI ocupó el pasado junio la ciudad de Mosul y otras zonas de la mitad norte del país, proclamando a fines de ese mes un califato en los territorio bajo su control en Irak y Siria.
