El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy el «atroz» ataque contra una escuela en Pakistán y destacó la «cobardía» que supone atacar a niños indefensos en sus clases.
«Los corazones del mundo están con los padres y las familias que han perdido a sus seres queridos en el horrible ataque en una escuela de Peshwar», señaló Ban al comienzo de una intervención ante el Consejo de Seguridad.
El diplomático coreano condenó este acto «atroz en los términos más enérgicos» y aseguró que «ninguna causa puede justificar una brutalidad semejante».
«Atacar a niños indefensos mientras estudian es un acto de horror y de cobardía repugnante», subrayó Ban, quien recordó que las escuelas tienen que ser lugares seguros en todo el mundo.
«Tener una educación es un derecho de todos los niños. Ir al colegio no debería ser un acto de valentía», insistió.
Ban trasladó sus condolencias al pueblo y al Gobierno de Pakistán y, especialmente, a quienes se han visto afectados por la tragedia de hoy.
Por su parte, el director ejecutivo de Unicef, Anthony Lake, dijo en un comunicado que este «horrible e insensible» atentado debe hacer «algo más que sacudir la conciencia del mundo».
«También nos debe convocar, aún más, para apoyar a los padres de Pakistán que desean para sus hijos la mejor educación posible, y todos los que están trabajando para proporcionarla», agregó Lake.
Más de 136 personas, la mayoría niños, murieron hoy y otras 100 resultaron heridas en un asalto perpetrado por los talibanes en una escuela gestionada por el Ejército en la localidad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán.