Del 2014 al 2015, salto sin red protectora

El 2014 ha sido un año bipolar al que le urge ayuda profesional. Un año para el diván. Durante la primera mitad del año dominaron las sonrisas y el optimismo; en la segunda, la crispación y el pesimismo. Llegamos a diciembre en medio del desconcierto y, lo que es más grave y tiene que solucionarse pronto, dudando de nosotros, de nuestra capacidad para encarrilarnos en una ruta de progreso y bienestar. Este aspecto es particularmente dañino porque el año que entra, año de elecciones, la lógica de la competencia política puede acentuar la confrontación con consecuencias difíciles de imaginar. Lo que está sobre la mesa es la viabilidad de consolidar en el país un sistema democrático, lo que no es poca cosa.
LOS RESULTADOS A LARGO PLAZO
La primera mitad del año permeó la expectativa de progreso inminente ante la aprobación del ambicioso paquete de reformas estructurales. La aprobación se consiguió gracias a un alarde de negociación entre las cúpulas políticas del país lo que llamó la atención de los observadores internacionales. Las reformas se aprobaron y dese hace algunos meses andan por ahí, buscando pistas de aterrizaje para comenzar a dar resultados. El camino será largo y en ocasiones áspero.
CONTROL DE ACTIVISTAS
La reforma educativa, en la que están depositadas muchas expectativas, responsabilidad de Emilio Chuayffet, tiene obstáculos muy serios. En estados como Guerrero y Oaxaca es claro que tiene dificultades de aplicarse, pues poderes fácticos, en este caso los activistas de la Coordinadora Magisterial tienen control férreo sobre el proceso y no hay a la vista posibilidades reales de arrebatárselo. Ellos han demostrado su violencia y han permitido la participación de grupos y grupúsculos desestabilizadores y dañinos.
FRACTURA POLÍTICA
La reforma hacendaria, instrumentada por Luis Videgaray, logró los efectos recaudatorios que buscaba pero propició una fractura política entre la comunidad empresarial y el gobierno de Enrique Peña que ha sido muy costosa. El gobierno dijo hace algunos meses que no tenía pensado hacer ningún cambio, pero ante su progresivo debilitamiento ya aceptó que podría reconsiderar y bajar impuestos que han resultado gravosos para la iniciativa privada y para la clase productiva.
RESULTADOS MIXTOS
La reforma en materia de telecomunicaciones ha tenido hasta el momento resultados mixtos. Es verdad que abrió la competencia pero no con las resonancias románticas que algunos ingenuos esperaban. El primer ganador visible es Ricardo Salinas que adquirió una cantidad colosal de efectivo al vender su telefónica a un gigante norteamericano. El rubro más llamativo para la opinión pública, el de las nuevas cadenas de televisión abierta, cayó en un paréntesis anti climático al conocerse que los postores finalistas son los hermanos Vázquez Raña, que supuso un fuerte golpe con la realidad.
REFORMA OPACADA
El caso más preocupante sin embargo, es el de la reforma energética en la que el gobierno invirtió todas sus canicas. Mientras el secretario de Energía,
Pedro Joaquín, hacía un recorrido mostrando los supuestos encantos de la reforma y comenzando a administrar la abundancia, el precio internacional del petróleo comenzó una caída en picada que no se ha detenido y que opacó el brillo de la reforma que sigue adelante pero ya sin el brillo con el que se lanzó. La gran fiesta, el carnaval, será cuando mucho un coctel.
¿PODRÁN CON EL PAQUETE?
No hay que olvidar que para lograr el apoyo del PAN para aprobar la reforma el gobierno aceptó procesar algo que quiso ser una reforma política y que supuso el fin del Instituto Federal Electoral, de manera que la elección de junio del año que entra, que ya está encima, será organizado a nivel nacional por una institución nueva y no hay garantías de que podrá con el paquete.
ALCALDE MATÓN
Con todo, las dificultades de las reformas para instrumentarse y comenzar a dar resultados visibles eran un problema menor para el gobierno de Enrique Peña Nieto que no sabía lo que le esperaba a partir de la noche del 26 de septiembre cuando un contingente de normalistas de la escuela de Ayotzinapa llegó a la ciudad de Iguala, Guerrero, que presume ser cuna de la independencia y de la que brotan pesadillas y fosas clandestinas. Esa noche el alcalde José Luis Abarca y su esposa estaban en un acto de proselitismo político. Al enterarse de la presencia de los normalistas, Abarca ordenó detenerlo de cualquier forma para que no arruinaran su numerito y se desató un pandemónium que todavía este fin de semana sigue vigente y supuso un golpe de timón macabro. A partir de entonces el barco de la nación navega entre olas bravas, muy cerca de los riscos, con posibilidades de naufragio
LA BARBARIE
Como todos saben esa noche murieron en Iguala seis personas y otros 43, todos los normalistas desaparecieron. Los indicios apuntan a que fueron asesinados, sus cuerpos quemados y las cenizas esparcidas. Una lucha entre bandas antagónicas de narcos que operan en esa zona, Guerreros Unidos y Los Rojos, explica, dicen, la barbarie. Hasta escribirlo es difícil. Desde entonces todo cambió. El gobierno federal pidió en un principio que el gobierno estatal asumiera responsabilidad. Cosa que no ocurrió.
EL FINAL DEL AÑO
¿Qué ha sucedido desde entonces? El alcalde y su esposa huyeron pero fueron capturados, cayó el gobernador Ángel Aguirre y han sido detenidos un par de docenas de policías y sicarios, todos implicados. La sociedad, indignada, reaccionó con movilizaciones en todo el país e incluso en el extranjero. La buena reputación del país en el extranjero se desmoronó. El llamado Momento de México también fue reducido a cenizas. Quedó al descubierto que el poder corruptor del narcotráfico tocó en esa región a todas las instituciones del Estado que se sumaron para conformar una gran mafia. Las movilizaciones en la ciudad de México también causaron bajas, como la del ex jefe de la policía capitalina.
El presidente Peña Nieto fue a Guerrero, aunque no a Iguala sino a Acapulco y pidió superar el dolor de lo ocurrido. Ése es el panorama que impera a unos días que termine el año.

2015, AÑO ELECTORAL

Comenzando el año próximo se darán a conocer nombres de candidatos a las nueve gubernaturas en juego, algunas tan relevantes como Nuevo León y también Guerrero y Michoacán, estados donde tintinean los focos rojos por todos lados.

Habrá elecciones de diputados federales para conformar la nueva cámara de Diputados, de gran importancia para conservar la gobernabilidad y estabilidad en el país. Se elegirán también en algunos estados diputados locales y Presidentes Municipales.

El gran reto será no solo elegir al candidato de un partido, sino a hombres y mujeres honestos y comprometidos con la sociedad, libres de dudas sobre su comportamiento personal, será una difícil tarea de los partidos políticos para seleccionar los candidatos idóneos y para convencer a los votantes.

SOCIEDAD OFENDIDA Y DESANIMADA

La nueva institución electoral estará a prueba, los responsables de organizar la elección tendrán un nuevo reto, el financiamiento y costo de las campañas, la sociedad reclama transparencia y austeridad en los gastos electorales.

Los partidos ayudarán a la confianza de los electores o propiciarán como ya ha sucedido, que ante una derrota descalifiquen el proceso y deformen la verdad a su conveniencia, ésta es una gran responsabilidad y un gran riesgo. Los ahora Morenas son expertos en esta aplicación de medias verdades y grandes mentiras. Los actores políticos y sus partidos han sido calificados en las encuestas y mediciones de opinión pública como los menos confiables, ¿cuál será la reacción de una sociedad ofendida y desanimada?

VOTO DE CASTIGO Y ABSTENCIONISMO

Hay más de mil posiciones en juego. Las campañas profundizarán las diferencias entre los actores políticos en la lucha por el poder. ¿Cuál será la reacción de los ciudadanos? ¿Darán un voto de castigo a los integrantes de la clase política? ¿Imperará el abstencionismo? Lo cierto es que el brinco de un año a otro será como un salto circense de trapecio sin red protectora. Todo puede ocurrir. Los reflectores apuntan a la parte más alta de la carpa. ¿Los actores políticos completarán la pirueta o se precipitarán al vacío?… El compromiso es con México y los mexicanos, los partidos políticos tendrán que pensar primero en México y después en sus intereses sectarios, los actores tendrán que demostrar su compromiso social y su limpieza personal, estarán a prueba de todos, gobierno, instituciones, partidos y políticos… éste es el gran salto a la pista de la realidad.