Importantes pérdidas económicas sufrieron comerciantes del Pasaje Hidalgo, en el corazón del Centro Histórico de esta ciudad, luego de que vendedores callejeros ocasionaron un corto circuito y un apagón de unas cuatro horas, a consecuencia de la instalación de “diablitos”.
Fueron alrededor de 30 comercios que se quedaron sin energía eléctrica desde las 9 de la mañana, lo que reanimó las demandas de los propietarios de estos establecimientos de retirar a vendedores callejeros en ese sector, pues sufrieron pérdidas económicas importantes, sobre todo neverías y restaurantes.
Francisco Acosta Leos, propietario de negocios de venta de zapatos, dijo que en su caso no pudo entrar a su negocio, dado que la cortina trabaja con electricidad, por lo que su local permaneció cerrado.
Respecto a los negocios dedicados a la venta de alimentos y golosinas, como helados y restaurantes, las pérdidas fueron mayores, debido a que los congelados se hicieron agua.
“No sólo el Ayuntamiento, si no la autoridad en general, deben hacer respetar los derechos del comercio establecido, porque nosotros pagamos recibo de luz y al existir estos diablitos nos generan un riesgo latente en nuestro patrimonio y nuestras ventas. Cualquier día de estos pueden ocasionar un incendio de importantes magnitudes”, puntualizó.
Y cuestionó: “¿En dónde está la mano de Protección Civil”. Enseguida solicitó la reubicación de los vendedores callejeros, tras considerar que un transformador de energía eléctrica se sobrecalentó, debido al uso indiscriminado de “diablitos” para obtener electricidad de manera ilícita.
La falla se registró alrededor de las 9 de la mañana con la explosión del transformador y resultaron afectados no menos de 30 establecimientos, según el recuento hecho por los propios empresarios, luego de solicitar auxilio a la Comisión Federal de Electricidad, cuyos empleados lograron reparar los daños hacia la una de la tarde.
