Arzobispo no será escenografía de candidatos, afirma Priego R.

Apartidista, pero claramente no política, se declaró la Asociación Religiosa denominada Arquidiócesis de San Luis Potosí, a través de su portavoz oficial Juan Jesús Priego Rivera, quien reconoció que, pese a esto, cada sacerdote tiene, obviamente, sus preferencias político-partidarias.
Priego aseguró que la relación de la Asociación Religiosa con los partidos y los candidatos “se encuentra abierta en igualdad de condiciones”, pero advirtió que en modo alguno el jerarca católico potosino se prestaría como escenografía de promoción electoral a la que luego se encuentran tentados algunos candidatos.
Con todo, y sin preferencias para nadie, las puertas de la Iglesia Católica se abrirán a quien las toque.
Sin embargo y a pesar de la declaración de apertura, la iglesia se sujetará a la legislación y a los protocolos electorales, evitando que los candidatos se saquen algunas selfies –que están de moda—, con la aviesa intención e interés de promoverse entre los feligreses.
La Iglesia promoverá intensamente la participación electoral; demandará a los candidatos expresarse con verdad y desenvolverse con transparencia, abstenerse de prácticas ilegítimas, como la cooptación, el condicionamiento de un servicio público o la descarada compra de conciencias.
Por eso, ha llamado a los candidatos a la honestidad, la honorabilidad, el respeto a la dignidad de la persona de los ciudadanos, el cabal cumplimiento de las promesas realizadas en campaña y, a los ciudadanos les demandó participación consciente, en libertad, la emisión de un voto convencido y meticulosamente analizado y que no se desprenda de una promesa o de una dádiva, sino de un compromiso firme.
Respecto del sentido del voto, dijo que la Iglesia: los sacerdotes, los religiosos y religiosas y los laicos que la integran emitirán votos personalísimos, no corporativos; llamó a los partidos y a las organizaciones sindicales a evitar el voto corporativo, a promover el voto personal, libre y secreto, acorde a la conciencia, la simpatía, la ideología y la esperanza de cada elector. De ahí que la promoción del voto que realice la Iglesia no se sujetará a ninguna entidad político-partidaria, sino que será un llamado universal y un llamado para el ejercicio responsable de cada persona en la toma conjunta de una decisión, una estrategia y un rumbo político para el estado y los municipios de San Luis Potosí.