Super tie break / De tenistas padres y padres de tenistas

Super tie break

Por: Óscar Rodríguez Gómez

De tenistas padres y padres de tenistas

Ahora van los hombrecitos. Arranca el Masters 1000 de Paris, el noveno y último torneo de la serie del año que reparte 2.884.675 euros en premios y que marca la despedida hasta 2015 para los que no participen en las Finales ATP ni en la definición de la Copa Davis. Para los campeones del mundo, la temporada cerrará hasta el Masters de Londres.

En este certamen en superficie dura y bajo techo, Novak Djokovic busca retener el título logrado en el certamen también conocido como el París-Bercy, en 2013. Y aunque su puesto está seriamente amenazado por Roger Federer, ahora resulta que el serbio ha hecho de su inminente rival un ejemplo a seguir…como padre de familia.

En busca de su sexto título del año, un Nole de 27 años resplandece de felicidad tras de que la antepenúltima semana de octubre naciera en el aristocrático Mónaco su primogénito. Surgido de las ruinas y la miseria de la guerra serbio-bosnia, forjada su juventud en la tenacidad por la vida y hoy el mejor tenista del planeta ( Nadal se la pasa lesionado o enfermo), Djokovic declara: «Ser padre es lo más bonito que me ha pasado en mi vida.

Pero no creo que afecte a mi carrera tenística… Hemos esperado este hijo 9 meses, se ha hecho largo. Pero no me ha distraído de mi carrera y de mi tenis. Estaba impaciente por ser padre, de vivir este momento feliz juntos (refiriéndose a su esposa Jelena). Afortunadamente estaba allí cuando nació y no me ha cambiado el programa».

«Ser padre es para mi ahora ser el número uno», indica Nole, aunque ha reconocido también el aliento de un Federer, padre de dos parejas de gemelos y a quien el serbio ya imita en su vida familiar y, como hace el suizo, quiere que su familia le acompañe en los torneos.

«Es importante poder ver como mi hijo crece, participar en su infancia. Pero reconozco que la vida de un tenista no es sencilla con un niño, hay muchos viajes, muchos hoteles, no es fácil tener una rutina», ha señalado. «Si Roger lo logra yo también puedo intentarlo. Hay otros tenistas que son padres. Voy a preguntarles para apoyarme en su experiencia».

¿Cómo le respondería un padre mexicano de hija o hijo tenistas junior ? Quizá la tierna experiencia de ver al crío anotar su primer punto, de iniciar su vida competitiva en su club, en sus intercolegiales (como en Europa o E.U.), en los regionales y en los seccionales hasta llegar a los nacionales FMT, sea transmisible con facilidad. Pero ¿ Qué le respondería el padre ilusionado cuando su hij@ ingresa a la ITF ?

Esos “muchos viajes, muchos hoteles”, obviamente gratuitos para los grandes entre los grandes, en el caso de los juniors adquiere un sentido peyorativo en tanto que los padres, o quedan en la miseria por sostener ese tren de vida; o bien se convierten en tocapuertas en busca de apoyo.

O lo indecible: pactos silenciosos, favores retribuídos, incluso tráfico de influencias, a menos que realmente el o la jugadores sean excepcionales, y aún así, condicionados a la pleitesía a sus favorecedores, públicos o privados. El caso de la Asociación Potosina de Tenis (APT), es patéticamente ilustrativo.

De acuerdo con el Comité de Competencias Juveniles ITF, la solidez de una asociación tenística depende, mínimamente, de una estructura de trabajo; de programas para el desarrollo de juveniles; estructura de competitividad lógica; áreas de trabajo específicas para cada necesidad y orden en el trabajo con objetivos a mediano y largo plazo.

Una carta dirigida al presidente de ATP, Luis Arturo Estrada Cabral, fechada el 2 de mayo del año en curso y de la cual se tiene copia, hace un reclamo público al desempeño del susodicho, simplemente con objeto de exigirle transparencia en la inminente asamblea en la que se elegirá un nuevo Consejo Directivo.

Enmarcados en un historial de agravios que parten del momento en que el feneciente “Consejo” de un solo hombre fue virtualmente designado, pasando por atentados a los derechos laborales, ocultamiento de información (los estatutos aparentemente perdidos) e indefiniciones fiscales, los reclamos amplían el listado de barbaridades cometidas a situaciones concretas.

El Centro Tenístico Potosino (CTP), convertido en negocio de alquiler de canchas, no mejoró su infraestructura ni la preparación de sus mentores, llegándose a negar el acceso a sus instalaciones al equipo de tenis de la Universidad Autónoma de SLP.

Además, disminuyeron los torneos profesionales, desapareció el torneo de veteranos del Club Libanés, no se compartió tareas con los clubes que organizan eventos nacionales e internacionales (eso si, Mr. Estrada y Mr. Zacarías, del INPODE, se ven lindos en la foto con los jefes de la ITF) y…

La lista sigue con la incapacidad de APT para conseguir patrocinios importantes (los mundiales juveniles vinieron por cuenta de Carlos López Medina y el Banco de París, el Nacional y el Challenger, por cuenta de torterías, entre otras pymes). Pero lo peor, sobre todo para los padres de familia, es el empleo de los dineros por cuotas para beneficio de chic@s de familia cercanos a los señores del feudo tenístico conservador.

También se privilegió a algunos jugadores y entrenadores con becas entregadas al contentillo del monoconsejo, saltándose las inexistentes asambleas requeridas y ateniéndose a criterios que pervierten lo básico del lineamiento FMT que textualmente dice cómo se selecciona a un jugador para apoyarlo. La primera cláusula basta como botón de muestra:

(Que) “El comportamiento de los jugadores seleccionados haya sido correcto y hayan respetado la reglamentación vigente de la FMT, de la ITF y las instancias gubernamentales de nuestro país rectoras del deporte y además que se encuentren (en) buenos términos con esta Federación”. Y como la FMT está formada por las asociaciones estatales, esos “buenos términos” son extensivos a ellas y a lo que le de la gana a quienes las controlan.
Los padres de tenist@s, y no los tenistas padres, tienen la palabra. Suerte, Nole!!!!