Es verdad, aunque la figura materna puede variar de una cultura a otra, las de nuestro país tienen frases que, a pesar de las generaciones, no pasan de moda.
Unas horas bastaron para que el hashtag #FrasesDeUnaMadreMexicana se convirtiera en la tendencia número uno de Twitter.
El reto era sencillo, sacar de nuestro inconsciente todas esas frases que hemos escuchado por lo menos una vez de mamá, y que, curiosamente, se repiten de generación en generación y sin importar el código postal.
«Porque lo digo yo», «uno como quiera, pero las criaturas», «te calmas o te calmo» son tan sólo una muestra de lo que un niño, o incluso muchos adultos, escuchan a diario en casa o cuando hacen una visita a la casa de su madre.
Hace apenas unos días, en una sobremesa, una ejecutiva de empresa farmaceútica recordaba dos pasajes con su madre.
El primero cuando de niña se hacía pasar por enferma para faltar a la escuela, y terminaba poniéndose el uniforme ante la máxima: «si no hay sangre, no cuenta».
La misma persona compartía que tras 15 años de ir a clase de ballet, se enfermaba justamente por las tardes para que su mamá no la obligara a ir.
«Es que mamá, no tengo mucha gracia para bailar», a lo que recibía como respuesta:
«Más a mi favor, si después de 15 años no tienes gracia, entonces imagínate si no hubieras ido nunca».