Exigen en Sonora liberar a líder yaqui

Distribuidos en tres contingentes, más de 30 mil personas —de acuerdo con los organizadores— marcharon para exigir la liberación del vocero de la tribu yaqui, Mario Luna, y de Fernando Jiménez, a quienes consideraron presos políticos por defender el agua.

El primer grupo estuvo encabezado por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, líder moral del PRD, así como de gobernadores yaquis. También participaron representantes sociales.

Durante la marcha por la Dignidad y Respeto, que duró más de dos horas, demandaron la liberación inmediata de los líderes yaquis, el cese de operaciones del Acueducto Independenciay juicio político contra el gobernador de Sonora, Guillermo Padrés.

El perredista externó su solidaridad hacia los líderes detenidos y recordó que su padre, Lázaro Cárdenas, como presidente de México, en 1940 reconoció los derechos de la tribu y emitió un decreto donde los dotó de 50% del agua que emana del río Yaqui.

Dijo: “Venimos luchando porque en nuestro país rija cabalmente el estado de derecho. (…) Vengo a expresar mi solidaridad con quienes están defendiendo sus derechos, el derecho al agua que tiene la tribu, el derecho al agua que tienen los agricultores y el derecho al agua que tienen los habitantes”.

Mario Luna y Fernando Jiménez son presos políticos por defender el agua de la tribu, no hace falta despojar a la etnia del agua a través del Acueducto Independencia, son malas decisiones y malas autoridades, comentó.

Como parte de la protesta, se aglutinaron miles de personas y rompieron piñatas con apariencia del mandatario estatal Guillermo Padrés.

Además, lanzaron consignas contra el gobernador sonorense, como: “La tribu yaqui está de pie”, “fuera Padrés, fuera Padrés”, “no al Novillo”, “justicia para Mario Luna”.

Al término de la marcha se colocó un templete donde estuvieron representantes de la tribu yaqui, senadores, diputados federales y locales, alcaldes y ex alcaldes del sur de sonora.

Ahí, frente a los miles de manifestantes, estaban también las madres de Mario Luna y Fernando Jiménez, quienes rompieron en llanto ante las muestras de solidaridad.

Los dirigentes del Movimiento del Agua, de los agricultores y activistas de Hermosillo exigieron la inmediata liberación de los líderes yaquis, y que el gobernador del estado acate la ley, ya que el Acueducto Independencia opera sin el manifiesto de impacto ambiental y las autoridades federales no hacen nada al respecto.

Estas irregularidades son pasadas por alto por la Conagua, que es la que opera el acueducto, externaron los líderes de los movimientos, que manifestaron su hartazgo por la falta de gobernabilidad en el país, ya que se permite a un mandatario violentar la ley y perseguir y acosar a la tribu yaqui desde que empezó la lucha por intentar detener la obra hidráulica.

“Los habitantes del sur del estado queremos que se respete el estado de derecho”, expuso Juan Leyva, jefe del Distrito de Riego del Valle del Yaqui, al solicitar al presidente Enrique Peña Nietoque haga respetar la ley y sus instituciones, pues la Suprema Corte de Justicia emitió el fallo de suspender el trasvase de la presa El Novillo, que lleva agua del río Yaqui a Hermosillo.