Se afirma que los niños imitan la conducta que van aprendiendo de los adultos con quienes conviven. Un mal ejemplo llega a ser tan perjudicial, al grado de generar comportamientos indeseables. Sin embargo, ¿hasta qué punto la conducta de los hijos problemáticos es culpa de sus padres?
El comportamiento de los padres puede mejorar o agravar los problemas de conducta de los niños. Asimismo, la falta de supervisión en sus actividades los predispone fuertemente a la conducta antisocial de los hijos, haciéndolos más pesimistas y hostiles, confirma un estudio realizado para el Departamento de Educación del Gobierno de Reino Unido.
Al respecto, el doctor Eduardo Calixto, en la nueva serie de Neurosalud, explica a detalle por qué los hijos problemáticos suelen ser un reflejo del carácter de sus padres.
Cómo criar niños optimistas
Cuando la mamá y el papá mantienen una actitud positiva, aún en situaciones adversas, los hijos desarrollan un pensamiento optimista.
La psicóloga Christi Bamford, de la Universidad de Jacksonville en Florida, Estados Unidos, afirma que los niños de 5 a 12 años tienen grandes habilidades para adaptarse.
Es precisamente en esta etapa cuando ambos padres pueden influir plenamente en sus hijos, transmitiéndoles optimismo y seguridad ante cualquier experiencia, por más difícil que parezca, agrega la especialista.
Christi Bamford sugiere a los padres que la actitud positiva es una habilidad que pueden adquirir para llegar a ser un verdadero ejemplo para sus hijos. Una manera de lograrlo es tener autoconciencia de su comportamiento y rectificar en caso de ser necesario.
Como padres, queda la difícil tarea de ayudar a los hijos a mantener un comportamiento gentil para que su desarrollo emocional y físico sea óptimo. Esto es clave para la vida adulta.
