El Colmex honra al FCE por sus aportes; lectura, de interés público

El mensaje pareció llevar dedicatoria para aquellas voces que consideran que el Fondo de Cultura Económica (FCE) debe desaparecer. El sociólogo Fernando Escalante lo dejó claro: “Lo que justifica al Fondo es una idea muy simple, que la lectura es un asunto de interés público”. Ayer, la institución que este año cumple 80 años fue reconocida por El Colegio de México con el Premio Daniel Cosío Villegas 2014 por sus contribuciones al estudio de las ciencias sociales y humanidades.
Y los atributos que se otorgaron al FCE no fueron menores: “Nadie ha tenido mayor influencia sobre las ciencias sociales en lengua española que el Fondo de Cultura Económica, el panorama de las ciencias sociales en español resultaría irreconocible sin los libros del Fondo de Cultura Económica”, recalcó Escalante.
A nombre de El Colmex, el autor de Estampas de Liliput. Bosquejos para una sociología de México no sólo justificó la entrega del reconocimiento a la editorial pública sino también argumentó su existencia: “Premiar a una institución significa reconocer la importancia de una idea, en este caso lo que justifica al Fondo es una idea muy simple: que la lectura es un asunto de interés público, lo que pasa que esa idea tan simple resulta ser, al final, enormemente complicada”.
Significa, dijo, “que es de interés público que la gente aprenda a leer, pero también es de interés público la publicación de algunos libros y la traducción de algunos libros y la circulación de los libros y también la integración de un mínimo canon, el cuidado de un patrimonio cultural y más. La lectura es de interés público”. En México, agregó “hay muchas editoriales que hacen muchos libros con miles de ejemplares, pero la capacidad de pensar en los libros que hacen falta, más allá de consideraciones de rentabilidad o popularidad, esa no la tiene nadie como el Fondo. Ahora como entonces sus libros sirven como soporte para muchas otras lecturas, son un punto de partida”.
En las instalaciones de El Colmex, su presidente, Javier Garciadiego, entregó al titular del FCE, José Carreño Carlón, una réplica de la escultura Semina motum, de Luis Palacios Kaim. Este año, por tratarse de una institución, el premio no incluyó un monto económico, pero sí el reconocimiento. El FCE, dijo Garciadiego, “es una institución a la que no podemos pagar la deuda que tenemos con ella; todas las instituciones de educación vinculadas a ciencias sociales y humanidades tenemos una deuda impagable con el Fondo”.
Al recibir el galardón, que también se ha entregado a Mario Molina y Pablo González Casanova, Carreño reconoció la labor de todos los hombres que han hecho posible la existencia del FCE y enumeró su dimensión editorial. “Ni siquiera haría falta aclarar que este reconocimiento que entrega El Colegio se refiere a las aportaciones a las ciencias sociales y a las humanidades acumuladas por el Fondo a través de varias generaciones, de hombres de letras, de ciencias, autores, editores, diseñadores, traductores, ellos son los que han escrito esta biografía gloriosa del Fondo”.