José Emilio Pacheco se va al sureste

José Emilio Pacheco ‘vivirá’ en el espacio que él más amaba: La Universidad”, afirmó ayer la escritora Cristina Pacheco, viuda del poeta, durante la inauguración de la vigésimo sexta librería del Fondo de Cultura Económica (FCE) que lleva el nombre del autor de Las batallas en el desierto.
“El pensaba mucho en la Universidad y en los jóvenes. Su anhelo era que todas las personas pudieran estudiar, que pudieran tener contacto con la lectura y que después escribieran libremente, aunque no publicaran, para tener un contacto más íntimo con las palabras”, agregó.
Enclavada en el campus de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), como parte de la primera etapa del Centro Cultural Balún Canán, el recinto que será “punta de lanza” en la promoción del libro centroamericano y primero del sello paraestatal en el sureste del país abrió sus puertas ante cientos de jóvenes universitarios.
Tras una ceremonia cálida e informal, los alumnos recorrieron los 800 metros cuadrados del edificio de concreto, acero y cristal diseñado por el arquitecto Mario Armella y pudieron constatar la oferta de los 50 mil ejemplares exhibidos.
La librería empezó a construirse el 27 de enero pasado, un día después de la muerte de José Emilio Pacheco, por lo que el gobernador de la entidad, Manuel Velasco Coello, sugirió hacer un homenaje al ensayista poniéndole su nombre.
“José Emilio quería a Chiapas por su relación con Rosario Castellanos y Jaime Sabines. Trabajó con ella en la UNAM. Se llevaban bien. Tenían un humor muy parecido, a veces muy ácido. Él nunca dejó de leerla y sostener que era una poeta incomparable”, confesó Cristina Pacheco en entrevista al final del acto inaugural.
“Lo que más me importa es que reconozcan a José Emilio como un gran escritor, pero también como una persona muy querida. Si viviera estaría muy agradecido de que esta librería lleve su nombre y estaría pensando que otros escritores merecían más que él estar en ese lugar”, añadió la también periodista.
Dijo que los libros de José Emilio se exhibirán rodeados por la obra de personas que fueron sus amigos, compañeros de trabajo y maestros. “Lecturas que de alguna manera lo formaron”.
El rector de la UNAM, José Narro Robles, quien encabezó el acto junto con el gobernador Velasco Coello, el rector de la UNACH, Jaime Valls, y el director del FCE José Carreño, también hizo un elogio de Pacheco.
“Es uno de los grandes creadores e intelectuales de nuestro país. Representa mucho de lo mejor del humanismo hispanoamericano. En su obra florece la palabra, la belleza, el ritmo y la inteligencia. En él se conjugan el saber y el sentir, la razón y la emoción. Es un representante de los escultores de la palabra”, señaló el académico.
Narro leyó un pequeño discurso que no pudo dar a conocer en el homenaje nacional que se le dedicó en la UNAM al poeta el 30 de junio pasado, el día que debió cumplir 75 años. “Es grande sin importar cómo se le considere. Desde joven apuntaba para grande. En sus obras los lectores pueden encontrar las paradojas de la vida… Fue un hombre sabio, bueno y sencillo; un escritor gigante, agudo y profundo; un intelectual completo y libre. José Emilio Pacheco es nuestro y de todos. Lo echamos de menos y padecemos el vacío que dejó su fallecimiento”, indicó.
Un lugar de
encuentro
Por su parte, el gobernador Manuel Velasco destacó que esta primera etapa del Centro Cultural Balún Canán, en la que se ha invertido un total de 55 millones de pesos, festeja también los 40 años de la UNACH, de la que han egresado ya 63 mil profesionistas. Y anunció que la segunda etapa incluirá un auditorio para 160 personas, una galería de arte y un restaurante.
“Es un sueño universitario el contar con un espacio cultural, artístico y académico”, remató Jaime Valls. “Es un paso más en nuestra ruta educativa”, dijo del proyecto que incluyó la siembra de 250 árboles endémicos.
El arquitecto Mario Armella describió la Librería “José Emilio Pacheco” como “un lugar de encuentro entre la universidad y la sociedad de Tuxtla Gutiérrez; un planteamiento abierto a la ciudad, que invite a entrar en el recinto”.
Para diseñarlo, visitó algunas de las librerías del FCE. “Las librerías tienen que ser lugares muy vivos, dinámicos, no sólo para comprar un libro, sino donde puedas llegar a platicar, a leer, a tener juntas de trabajo. Ya son lugares para estar.
“Por eso, propuse abrir con una plaza que reciba a la gente que viene de la avenida principal (Belisario Domínguez), que haga amable el acceso. Y pensé la cafetería como un ancla para recorrerla, por eso está en el segundo piso, para ir descubriendo la librería poco a poco. Y la doble altura te da sensación de amplitud”, añadió.
Y justo eso hicieron los primeros visitantes de la librería, que a partir de hoy abrirá todos los días de nueve de la mañana a nueve de la noche. “Centros culturales como estos los hace suyos la comunidad, porque ella los pidió”, concluyó José Carreño Carlón. Además de Cristina Pacheco y Laura Emilia Pacheco, hija del autor de Morirás lejos, participaron en el festejo los escritores Vicente Quirarte y Francisco Hinojosa, así como el editor del sello Era, Marcelo Uribe.