El gobierno del estado se
ñaló que a la fecha suman
112 toneladas de peces muertos en la laguna de Cajititlán, lo que significa que más de cuatro millones 300 mil peces han muerto en dicho cuerpo de agua.
Sin embargo, el Ayuntamiento de Tlajomulco, donde se ubica el embalse, estableció que esa especie (popocha) no se comercializa porque no es comestible.
Además de que su mortandad es cíclica, tal como se presentó en otros años (2009 y 2013), muestra de ello es que sobrevivió a pesar de que antes no se limpiaban las aguas que se descargaban y desde hace cinco años se trata todo lo que se vierte a la laguna y ya se limpia el 70% de ellas.
Por ello, la muerte de los peces no daña a la economía de los pescadores de la laguna, ya que no se comercializa, pero sí afecta la imagen del lugar que vive del turismo y da empleo a 20 mil personas, todo por motivos políticos, ya que autoridades estatales buscan afectar al Ayuntamiento de Tlajomulco, por ser de oposición, establece un comunicado oficial.
El gobierno del estado, a través del vocero Gonzalo Sánchez, hizo un llamado a la cordura a todos los inmiscuidos para dar una solución a la contingencia ambiental en Cajititlán, a la vez que coincide con el Ayuntamiento de Tlajomulco de proponer una mesa técnica para el viernes, con la asistencia de especialistas y de representantes de los organismos federales, estatales y municipales que intervienen en la laguna, para ubicar el fenómeno de la mortandad y buscar una solución.
Tlajomulco insistió que se está cumpliendo en el saneamiento de las aguas que se vierten a la laguna ya que se han invertido más de 173 millones de pesos en plantas tratadoras y desde hace cinco años se limpian las aguas ya que los escurrimientos han crecido por el incremento de zonas habitacionales cercanas al embalse. Estableció que el encargado del cuidado de la laguna es la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ya que la misma constitución establece que es el único organismo encargado de cuidar y proteger las reservas acuíferas como la de Cajititlán.
