Accidentes en casa, más frecuentes en época de vacaciones

Contrario a lo que se piensa, el periodo vacacional puede tornarse trágico sin las precauciones adecuadas, pues los accidentes se incrementan 30%, especialmente en niños. Los expertos recomiendan extremar cuidados y vigilar a los pequeñines.
Accidentes en casa, más frecuentes en época de vacaciones
Con la llegada de las vacaciones, los padres de familia enfrentan otro tipo de problemas, ahora en el hogar. Esto se debe a que la casa es el lugar donde ocurre la mayor cantidad de incidentes que, en su mayoría, dejan secuelas a la salud.
De acuerdo con el Comité de Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los accidentes son acontecimientos no premeditados cuyo resultado son daños corporales identificables. Se trata, pues, de eventos de los que involuntariamente se derivan lesiones para las personas involucradas, y aunque son sorpresivos, pueden seguirse diversas acciones para mantenerlos al margen.
Los más comunes
Dicen que “la curiosidad mató al gato”, y esta frase es totalmente aplicable en los niños, quienes al estar más tiempo en casa se la pasan hurgando, ideando algún juego para entretenerse y explorando el medio.
“Los accidentes caseros son más frecuentes cuando los pequeños tienen hambre o están cansados, o bien, si son muy activos, están bajo el cuidado de personas diferentes a las habituales o se encuentran en distinto entorno (nueva casa o residencia de verano, por ejemplo). Asimismo, por lo general los imprevistos ocurren si los padres están ocupados o no tienen plena conciencia de los riesgos que el menor va adquiriendo a medida que crece”, advierte la Dra. María Luisa Hernández Lagos, pediatra egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y especializada en el Centro Médico Nacional Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), localizado en la Ciudad de México.
Las estadísticas revelan que es durante la temporada vacacional veraniega cuando los accidentes en niños se incrementan hasta 30%, siendo las consecuencias más frecuentes quemaduras, traumatismos cráneo-encefálicos (golpes en la cabeza), fracturas en huesos largos (brazos y piernas) e intoxicaciones por ingesta de medicamentos y productos de limpieza.
De acuerdo con la entrevistada, entre la amplia gama de accidentes destacan:
Quemaduras. Producidas por el Sol, estufas, lámparas, cerillos, cigarros, fogatas y líquidos calientes contenidos en alguna olla, tina o calentador.
Golpes en la cabeza. A causa de caídas de sillas altas, camas y otros muebles o escaleras.
Intoxicaciones. Generadas por el consumo de medicamentos, productos de limpieza o jardinería, insecticidas, pinturas, solventes, adhesivos, combustibles, perfumes y bebidas alcohólicas.
Atragantamiento. Por comida u objetos, o bien, estrangulación provocada por cuerdas, listones o cordones de juguetes y aparatos electrodomésticos.
Objetos atorados en alguna fosa nasal. Piedras pequeñas, pastillas, piezas de juguetes, frijoles o chícharos.
Cortaduras y raspaduras. Producidas por uñas filosas (ya sean las del niño o adulto), garras de animales u objetos punzocortantes.
Fracturas y esguinces. A causa de caídas, golpes o atropellamiento. Cabe destacar que los infantes se rompen los huesos con mayor facilidad que los adultos porque tienen áreas blandas en los extremos de cada estructura ósea, llamadas “placas de crecimiento”.
Contusiones. Moretones originados por caídas o golpes.
Problemas en ojos. Causados por polvo, arena u otro tipo de elementos extraños.
Más vale prevenir
Considere que más de la mitad de los accidentes ocurren en el hogar y que en los tres primeros años de vida este porcentaje se eleva a más de 80%. Ante ello, la Secretaría de Salud invita a toda la población a gozar placentero y seguro periodo vacacional, por lo que exhorta a tomar las medidas de precaución necesarias para mantenerse sano dentro y fuera de casa.
En el hogar:
Guarde los medicamentos y productos de limpieza bajo llave y lejos del alcance de los niños.
No coloque sustancias tóxicas en envases de refresco.
Utilice los insecticidas lejos de los alimentos.
Para evitar que su hijo sufra ahogamiento, no deje recipientes con agua cerca de él.
No permita que el pequeño conecte aparatos eléctricos.
Impida que los niños jueguen en la cocina.
Evite que corran o jueguen en las escaleras o cerca de ellas.
Coloque protectores de plástico en los enchufes o tomas de corriente eléctrica.
No deje que el pequeño se acerque a la estufa o calentador.
No cargue a su hijo mientras cocina.
Impida que los menores jueguen con objetos punzocortantes.
En la calle o lugares públicos:
Camine por la banqueta.
Cruce la calle en las esquinas.
Antes de cruzar una avenida o calle, voltee a ambos lados y camine con precaución.
No cruce corriendo.
Fuera de casa:
No se expongan por tiempo prolongado al Sol, sobre todo en las horas en que la radiación es más fuerte (de 11:00 a.m. a 4:00 p.m.).
Evite que los niños jueguen en lugares descubiertos o que estén sin camiseta, ya que el Sol podría ocasionarles lesiones graves, como quemaduras que en muchos casos favorecen el desarrollo de cáncer en la piel.