El pleno de la Cámara de Diputados avaló ayer, en lo general, el primer dictamen de las leyes secundarias de la reforma energética, con el cual se norma la entrega de contratos a empresas privadas y extranjeras en la exploración y explotación de petróleo y gas.
Tras cinco horas de debate y con 330 votos a favor del PRI, PAN, PVEM y Panal; y 129 en contra del PRD, PT y MC, se aprobó en lo general el dictamen que expide la Ley Nacional de Hidrocarburos, así como las modificaciones a la Ley de Inversión Extranjera, la Ley Minera y la Ley de Asociaciones Público-Privadas, el primero de seis dictámenes que conforman las reformas secundarias energéticas.
Al cierre de la edición, se mantenía la discusión de 793 reservas a artículos en lo particular, con dos escenarios: mantener el debate durante la madrugada o decretar un receso, para continuar hoy.
Buscan más seguridad a tierras
Anoche se perfilaba avalar una modificación planteada por José Rubén Escajeda (PRI) para cambiar los artículos 101 y 102.
El presidente de la Comisión de Energía, Marco Antonio Bernal (PRI), dijo que la modificación tenía consenso con la Confederación Nacional Campesina (CNC), el gobierno y legisladores y servirá para ampliar los derechos de los dueños de las tierras susceptibles a ser explotadas y así diferenciar las contraprestaciones (regalías) cuando se trate de petróleo o gas.
Según la minuta enviada por el Senado, el porcentaje que deberán pagar los contratistas a los propietarios de predios o titulares de derechos para la extracción comercial de hidrocarburos no podrá ser menor a 0.5% ni mayor a 2%, pero se perfilaba un cambio para garantizar que, donde se explote gas, los dueños tengan ganancias similares.
En cuanto a lo avalado, que se prevía sin cambios, se estipula que quedará prohibido otorgar asignaciones o contratos para la exploración y extracción de hidrocarburos en áreas naturales protegidas. Se prevén indemnizaciones a concesionarios mineros, en caso de que contratistas afecten sus superficies por la extracción de hidrocarburos.
Se ratificó eliminar el término “expropiación” de tierras por el de “ocupación temporal” para la exploración y explotación de hidrocarburos, en especial para la extracción de shale gas, a través del fracking, como aprobó el Senado.
A partir de 2016, se abre la importación de gas; las licitaciones se harán bajo los principios de transparencia, máxima publicidad, igualdad, competitividad, sencillez y un contenido nacional de 35% y no 25%, como lo propuso el Ejecutivo, con excepción de aguas profundas.
Se establece que los precios de las gasolinas y el diesel se fijarán bajo las condiciones del mercado a partir del 1 de enero de 2018 y no de 2020, como era la propuesta original del Ejecutivo. Es decir, a partir del primer minuto de 2018 terminará el monopolio de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Javier Treviño, del Partido Revolucionario Institucional, aseguró que esto incidirá de forma positiva en la vida cotidiana del mexicano.
Rubén Camarillo (PAN) acusó a la izquierda de oponerse a todo, porque lo único que les interesa es deshacerse de una bandera electoral para los comicios de 2015.
El coordinador del PRD, Silvano Aureoles, dijo que de nada sirve hablar de seguridad energética si la nación pierde la soberanía sobre sus recursos estratégicos.