Cosas de la Ciudad

Por El Diablo Cojuelo

AFILADA.- El alcalde Mario García Valdez anda con todo y con la guadaña bien afilada. Ya lleva seis funcionarios al hilo que ha dejado fuera de su administración y advierte que hará los cambios que sean necesarios para fortalecer el servicio a la ciudadanía, sobre todo de aquellos que no cumplen con su deber.
A TEMBLAR.- Los que deben estar temblando son varios funcionarios municipales que andan mejor en la grilla o en sus proyectos políticos personales o de grupo, en lugar de ponerse a trabajar, porque ya se les apareció el diablo, y eso se lo aplaude la ciudadanía que está harta de servidores públicos que no sirven para nada.
REGISTRO.- Entre los funcionarios que han quedado fuera de la administración del alcalde Mario García Valdez se encuentran: Jesús Carlos Cepeda Rodríguez, ex titular de Catastro y Desarrollo Urbano; Alberto Javier Echavarría Delgado, ex titular de Ecología y Aseo Público; Édgar Durón Puente, ex titular de Comercio; Beatriz Benavente Rodríguez, ex titular de Desarrollo Social; Manuel Lozano Nieto, ex titular de la Secretaría General del Ayuntamiento; Ivette Salazar Torres, ex titular de Ecología y Aseo Público; Guadalupe Chávez, ex titular del DIF municipal; Pedro Doroteo González, ex titular de Fuerzas Municipales, y un largo etcétera.
AUTORIZACIÓN.- Regidores de la Comisión de Desarrollo Urbano finalmente autorizaron la construcción del desarrollo inmobiliario Gran Peñón, ubicado en la Sierra de San Miguelito. Según informó el regidor Marco Zavala Galeana supuestamente obligarán a sus inversionistas “a proteger el área ecológica” en las 1 mil 400 hectáreas que comprende. Dicha determinación estaría relacionada con la salida para “atender cuestiones personales” del ahora ex director de Catastro y Desarrollo Urbano, quien aparentemente no cedía a autorizar ese fraccionamiento campestre. Asimismo, con el rumor de que regidores ya tienen predios en el sitio.
SUSTITUTO.- Quien sustituirá a Jesús Carlos Cepeda Rodríguez en la dirección de Catastro y Desarrollo Urbano es Juan Manuel López Acevedo, quien se desempeñaba en la Dirección General de Obras Públicas. Éste, por su parte, será reemplazado temporalmente por Jorge Chávez Godínez, quien fungía como director de Construcción del Ayuntamiento de la Capital. López Acevedo ha acompañado al alcalde Mario García Valdez, desde su paso por la UASLP, en donde fue encargado de la millonaria edificación de escuelas y oficinas.
COLAPSADA.- Aunque la tormenta del miércoles pasado ciertamente trajo un enorme volumen de agua, pues en menos de una hora la presa San José captó 210 mil metros cúbicos del líquido, de nuevo queda de manifiesto que a esta ciudad le urge dar mantenimiento a sus drenajes pluviales y construir obras hidráulicas que permitan gobernar convenientemente situaciones como la de antenoche. Muchas calles de la ciudad, sobre todo del Centro Histórico, parecían espantosos ríos de aguas embravecidas. Frente a un escenario como ese nos preguntamos: ¿qué nos hubiese pasado si esa tormenta hubiera durado dos o tres horas más?
¿CORRUPCIÓN?- Uno de los principales problemas que ha registrado el Bulevar del Río Españita durante las últimas tormentas consiste en la construcción de una especie de privada habitacional, cuyos desarrolladores hicieron una avenida de acceso al afluente. Aquí surgen varias preguntas: ¿Es el único acceso a esa rinconada habitacional?, ¿ya no son ese río y sus márgenes propiedad federal?, ¿cómo hacen sus moradores para entrar y salir del sitio con el bulevar convertido en río?, ¿quién permite que el escombro, arena y grava empleada en la construcción sea arrastrado al bulevar sin existir sanciones al desarrollador?
PARADÓJICO.- No deja de ser sorprendente el argumento por el cual la bancada de los antreros en el Congreso y en el Cabildo impulsa una reforma a la Ley de Alcoholes en el Estado, que fundamentalmente pretende más horas a la venta de bebidas embriagantes. Dicen que se justifica para acabar con la corrupción, porque de todos modos realizan esas actividades fuera del horario legalmente establecido, lo cual significa que pasan dinero a los inspectores para que se hagan desentendidos. Es decir, si la ley no puede con el delito, hagamos una ley cómoda al delito para que éste deje de serlo.