El regidor panista Jalil Chalita Zarur señaló que el gobierno federal es el principal causante del abandono en que se encuentra el campo mexicano, al no asumir «con cabalidad su papel como promotor del desarrollo rural».
Señaló que el sector agropecuario en el estado se enfrenta a falta de capacitación, ausencia organizativa de las autoridades y carencia de tecnologías adecuadas, por lo cual se requiere una nueva forma de mirar al agro y detonar su desarrollo.
En el estado —añadió – 4 de cada 10 municipios rurales enfrentan una situación de despoblamiento, es decir, salen más habitantes de los que ingresan o nacen. Este éxodo confirma el desplome de las actividades agrícolas como ocupación principal.
“El campo mexicano se ha quedado solo. El México rural ha sido abandonado. Por ello, urgen políticas públicas para reactivar la producción agropecuaria en el país”.
Hizo referencia como el principal factor de despobla-miento a la falta de motivación de los habitantes de las zonas rurales para cultivar la tierra, lo que genera la migración.
Cuando los varones jóvenes y adultos se van de los pueblos se provoca una subutilización de la infraestructura social, como escuelas y centros de salud, así como la pérdida de patrimonio familiar y cultural, lo cual requiere de políticas para que con urgencia propicien oportunidades de desarrollo.
Dijo también que otro de los graves problemas a que se enfrentan los hijos de los campesinos es que el 45 por ciento de los jóvenes apenas terminan la secundaria y tienen que desertar en sus estudios por falta de apoyo.
Chalita Zarur agregó que por desgracia el sector agropecuario padece de las peores crisis, está olvidado y las cosechas apenas sirven para el autoconsumo.
“Ante las necesidades apremiantes para sobrevivir, se ven obligados a buscar otras alternativas, entre estas la migración del campo a las grandes ciudades en donde prestan sus servicios como albañiles, mozos, carre-tilleros, lavadores de coches entre otras actividades como el comercio informal”.
Se debe buscar un nuevo nivel de pacto, basado en acciones “más efectivas y reales”, porque ha llegado el momento de una ampliación y abordar lo que realmente interesa a nuestro país y a su vecino del norte: la regulación de la emigración mexicana hacia Estados Unidos y el desarrollo tecnológico de nuestro campo.
