Cómo afectan las setas alucinógenas a la mente

Científicos que estudian los efectos de las sustancias psicodélicas de las setas alucinógenas han hallado que el cerebro humano muestra un patrón similar de actividad durante los sueños que cuando se toman drogas que expanden la mente.

Las drogas psicodélicas como el LSD y las setas mágicas pueden alterar profundamente la forma en la que percibimos el mundo, pero se sabe poco sobre lo que pasa físicamente en el cerebro.

En un estudio publicado en la revista Human Brain Mapping, los investigadores examinaron los efectos cerebrales de la psilocibina, el ingrediente psicodélico de las setas alucinógenas, utilizando datos de los escáneres cerebrales de los voluntarios a los que se había inyectado la droga.

«Una buena manera de entender cómo funciona el cerebro es perturbar el sistema de una manera notable y novedosa. Las drogas psicodélicas hacen precisamente esto, y son herramientas poderosas para explorar qué pasa en el cerebro cuando la conciencia se altera profundamente» , dijo el doctor Enzo Tagliazucchi, que dirigió el estudio en la Universidad Göthe, en Alemania.

Las setas alucinógenas crecen naturalmente por todo el mundo y han sido ampliamente utilizadas desde tiempos antiguos para ritos religiosos y ocio.

ESTADO ONÍRICO

Las personas que utilizan drogas psicodélicas a menudo describen una «expansión de la conciencia», incluyendo estados oníricos e imaginación vívida.

Para explorar las bases biológicas de estas experiencias, el equipo de Tagliazucchi analizó datos de imágenes cerebrales de 15 voluntarios que recibieron la psicolibina por vía intravenosa mientras estaban conectados a un escáner de imágenes de resonancia magnética funcional.

Los voluntarios fueron sometidos al escáner bajo la influencia de la psilobicina y cuando se les había inyectado un placebo o un fármaco simulado.

Los investigadores analizaron las fluctuaciones en lo que se denomina contraste BOLD, del nivel de sangre oxígeno-dependiente, que monitoriza los niveles de actividad cerebral.

Descubrieron que con psilocibina la actividad en la red del cerebro más primitiva vinculada al pensamiento emocional se hizo más pronunciada, con varias partes de esta red -como el hipocampo y la corteza cingulada anterior- activas al mismo tiempo. Este patrón es similar a cuando las personas están soñando.

También descubrieron que los voluntarios que participaron en el estudio tenían una actividad más disconexa y descoordinada en la red cerebral vinculada al pensamiento de alto nivel, como la autoconciencia.

«La gente a menudo describe tomar psilocibina como la producción de un estado de ensueño y nuestros hallazgos han, por primera vez, proporcionado una representación física de la experiencia del cerebro», dijo Robin Carhart-Harris del departamento de medicina de la Universidad Imperial de Londres, que también trabajó en el estudio.

«Me fascinó ver similitudes entre el patrón de actividad cerebral en un estado psicodélico y durante el sueño, sobretodo porque ambos implican las áreas primitivas del cerebro relacionadas con las emociones y la memoria».